La Asociación de Amigos de la Patagonia (AAP) lanzó este jueves la campaña “Alerta Patagonia”, para advertir sobre el riesgo de incendios en temporada veraniega. El objetivo es prevenirlos y “proteger los bosques y las comunidades patagónicas frente a un verano que se espera será caluroso, seco y con mucho turismo”, explicó la organización en un comunicado.
En este marco, Nota al Pie dialogó con el Director Ejecutivo de AAP, Sebastián Homps, quien comentó: “La gente está como acostumbrada a escuchar el tema de los incendios; pero lo que nosotros queremos hacer mucho hincapié es en la diferencia de por qué estamos tan insistentes con esto”.
De esta forma, se refirió a los focos ígneos ocurridos en marzo de este año en la Comarca Andina, por los que “se quemaron 13 mil hectáreas en nueve horas”. Además, explicó que “la combustión de los bosques es completamente distinta cuando es un incendio de interfase”, es decir, cuando hay localidades con viviendas “que tienen además gas, tienen garrafas, tienen combustible; está la gente ahí viviendo, o sea que ese incendio tiene un doble riesgo”.
En este sentido, expresó que no es sólo una cuestión ambiental sino también social. “Hay pérdidas económicas enormes, entonces se perdieron 500 viviendas en lo que fue el incendio de la Comarca Andina, más allá de que además fallecieron personas”, remarcó Homps.
El referente de AAP aseveró que “ya no es solamente un incendio que sucede en el medio del bosque, que bueno, ‘qué lástima que se pierde’; sino estar atentos a situaciones de las cuales podrían hacer una tragedia enorme”.
“Es un peligro gigantesco para la zona, por lo cual ahí es donde nosotros hacemos más hincapié; en lo que es la prevención tanto para el turista como para lo que es las viviendas locales”, explicó Homps.
Medidas preventivas
Desde la organización explicaron que “la presencia de incendios forestales es cada vez más frecuente y su intensidad, cada vez mayor”; y detallaron que sus causas son “factores climáticos como el déficit hídrico provocado por la falta de precipitaciones sumado a las altas temperaturas y sequía, como está previsto para este verano”.
“Es fundamental que tanto los residentes como los visitantes de la zona tomen medidas preventivas para reducir este riesgo”, advirtieron. En este sentido, no sólo plantean el “proteger los hogares de incendios, sino también predisponer el espacio para una rápida intervención de bomberos y brigadistas”.
En la misma línea, Homps comentó que, si bien “es muy lindo tener una casita en el medio del bosque”, hay que tomar algunas medidas. Por ejemplo, “cuidarse de que la vivienda esté alejada en un diámetro de 10 metros de los principales bosques y arbustos que tiene cerca y que pueden llegar a ser foco de incendio”.
Plantar conciencia ambiental también en Buenos Aires
La Asociación de Amigos de la Patagonia es una Organización No Gubernamental sin fines de lucro que nació hace 22 años en San Martín de los Andes, provincia de Neuquén. Desde entonces, sus integrantes ofrecen programas de educación ambiental; y, además de generar campañas preventivas como Alerta Patagonia, realizan plantaciones de árboles nativos en ecosistemas dañados de dicha región.
Esta práctica se extendió a Pilar, provincia de Buenos Aires, en cuya Reserva Natural AAP realizará el próximo miércoles 8 de diciembre de 10 a 15 horas una plantación de especies nativas. Con su entrada, les asistentes compran el plantín que van a plantar, y, para participar de la actividad -que se suspende en caso de lluvia- es necesario inscribirse en https://bit.ly/31usrzP.
En este sentido, el referente de AAP contó que la organización tiene dos puntos clave donde realizan proyectos de restauración ecológica. “Uno es en el Parque Lanín, con el programa Hacemos Bosques; y el otro son los humedales de la zona de Pilar, de Buenos Aires”, detalló.
Además, en la Patagonia han realizado plantaciones en otros lugares como el Parque Nacional Los Alerces y en Cholila, en Chubut; así como en Ñorquinco, en Río Negro.
Con respecto a la Reserva Natural pilarense comentó que la visitan hace ocho años; y que “nació en un espacio que era un basural, equivocadamente estaban tirando basura en un lugar que hoy en día es una reserva oficial de la Argentina”.
“Cuenta con varios ecosistemas dentro de esa reserva: tiene humedales, tiene bosques de tala, tiene pastizales. Y ahí trabajamos haciendo erradicación de exóticas, especialmente lo que es la acacia negra; y después lo que es plantación de especies nativas”, ya sean árboles o plantas como arbustivas, “lo que haga falta para recuperar el ecosistema original”, explicó Homps.
La semilla de la conciencia ambiental
Dado que AAP tiene más de dos décadas de existencia, sus integrantes han visto un aumento de la conciencia ambiental a nivel social. En este sentido, Sebastián Homps remarcó que “ha cambiado muchísimo los últimos diez, doce años”; y que hay una “generación verde” que “está mucho más involucrada, mucho más cercana en el activismo ambiental”.
“Somos conscientes también de los beneficios de la globalización en ese sentido, para saber que hay temas de conflicto mundial que se han tomado de manera local también”, explicó. De todas formas, advirtió que ese aumento de conciencia ambiental “va de la mano del incremento de situaciones mucho más peligrosas y complicadas”.
“Va siendo un tema cada vez más problemático, con mayor cantidad de injerencia a nivel social, productivo, económico, más allá de lo ambiental; obviamente la comunidad empieza a tomar más conciencia de eso y se involucra más”, concluyó el integrante de AAP.