París ha amanecido entristecida y ya no brilla como antes. La Ciudad de las Luces ha perdido a una de sus estrellas más brillantes e icónicas del cine de posguerra. El actor y reconocido baluarte de la Nouvelle Vague (Nueva ola) del cine francés, Jean-Paul Belmondo, se ha despedido de este mundo. Así lo ha comentado su abogado personal Michel Godest a la agencia de noticias AFP: “Estaba muy cansado desde hacía algún tiempo. Se apagó tranquilamente”.
El intérprete, quien al momento de su fallecimiento alcanzaba los 88 años, se transformó desde su primer y reconocido papel en la película “À bout de souffle” (mejor conocida como Sin Aliento) en uno de los rostros más reconocidos del cine francés y europeo de los años sesenta. Desde delincuentes de poca monta hasta policías con conductas cuestionables, Belmondo representaba en sus papeles a la clase y los rincones más marginales que poblaban la capital parisina.
Hitos de un mito
Construyó su carrera actoral estudiando en el Conservatoire National Supérieur d’Art Dramatique (CNSAD). Previamente a la obra maestra Sin Aliento del director Jean-Luc Godard, ya había demostrado sus dotes actorales y cómicos ante otros referentes de la Nouvelle Vague como Claude Chabrol. Su nariz torcida -a consecuencia de su afición juvenil al fútbol y el boxeo- le ha significado el apelativo de el hombre más feo del cine francés.
Sin embargo, eso no le ha privado mantener su mote de seductor frente a algunas de las actrices más bellas del séptimo arte europeo de aquellas épocas, como Ursula Andress o Laura Antonelli. Su encanto, su picardía y su carisma se contraponían con sus interpretaciones de ladrones, pícaros y buscavidas visto en sus películas. Esa ambigüedad también le ha permitido alejarse de la búsqueda incesante de la industria Hollywoodense, a quien ha acusado de “asfixiar” a la producción francesa.
Amigo personal de otro ícono parisino como Alain Delon, con quien ha protagonizado varios largometrajes, ha sido dirigido por los principales directores de ese periodo: Jean-Luc Godard, Claude Chabrol (Á Double Tour / Un doble viaje) Francois Truffaut (La sirena del Mississippi), Alain Resnais (El caso Stavisky) y Jean Pierre Melville (Léon Morin, prêtre / León Morin, Un cura; El soplón) entre otres.
Últimos años
El actor había permanecido alejado de las cámaras tras sufrir un ACV (Accidente cerebrovascular) en el año 2001. Sin embargo, y tras una positiva recuperación, volvería a participar de un film al formar parte de la película Un homme et son chien (Un hombre y su perro) de Francis Huster, que a la postre, sería su última actuación.
En los últimos años se lo ha visto disfrutar de Roland Garros (Grand Slam de tenis) además de fanatizar por el PSG (París Saint Germain), del cual fue socio fundador. Ha sido homenajeado con la Palma de Honor a su trayectoria en el Festival de Cannes 2011, además del León de Oro a su carrera durante el Festival de Venecia 2016. Inclusive, ha recibido un homenaje de l’Académie des César a su carrera durante la gala de los César 2017.
Sin ninguna duda, una leyenda del cine europeo ha dado paso a la inmortalidad. Un justo homenaje para un semejante trayectoria es compartir para todes les lectores de Nota Al Pie, parte de su filmografía más destacada, para poder seguir disfrutando de este icono francés.
Filmografía destacada
1959 – À bout de souffle, de Jean-Luc Godard
1960 – Dos mujeres, de Vittorio De Sica
1961 – Léon Morin, prêtre, de Jean-Pierre Melville
1963 – El guardaespaldas, de Jean-Pierre Melville
1964 – A escape libre, de Jean Becker
1965 – Pierrot le fou (Pierre el loco) de Jean-Luc Godard
1966 – ¿Arde París?, de René Clément
1969 – La sirena del Mississippi, de François Truffaut
1974 – Stavisky, de Alain Resnais1983 – Le marginal (El marginal), de Jacques Deray