Según informaron fuentes policiales a Télam, los Carabineros de la provincia italiana de Milán interceptaron hoy una carta dirigida al papa Francisco. Lo llamativo y alarmante es que la misma contenía tres balas.
“Il Papa-Città del Vaticano-Piazza San Pietro in Roma» decía la misiva interceptada en el centro de clasificación postal de Peschiera Borromeo, en la provincia del norte italiano.
También contenía un mensaje relacionado con el juicio iniciado en el Vaticano, el 27 de julio, por supuestas irregularidades en la compra de propiedades de la Santa Sede.
El escandaloso proceso judicial es contra diez personas. Entre ellas se destaca el cardenal Angelo Becciu, considerado uno de los hombres más poderosos de la Curia hasta el año pasado.
¿Cuál es el conflicto en el Vaticano?
El juicio por las operaciones financieras en el Vaticano continuará el 5 de octubre. Fueron imputadas, además de Becciu, nueve personas por diferentes delitos como malversación, blanqueo, fraude y abuso de poder. En particular, por la compra irregular de un edificio en Londres, que provocó un agujero de casi 400 millones de euros en las cuentas de la Santa Sede.
El promotor de Justicia (fiscal vaticano), Gian Piero Milano, empezó su investigación en 2019. En ese proceso, detectó “graves indicios” de corrupción en un caso de inversiones inmobiliarias.
¿Quién es Angelo Becciu?
El cardenal era considerado hasta el año pasado uno de los hombres más poderosos del Vaticano. Hasta que en septiembre del año pasado fue defenestrado por el papa Francisco por este caso de corrupción.
Es Licenciado en Derecho Canónico, y en la década de los ochenta accedió a la red diplomática de la Santa Sede. Trabajó en delegaciones de distintos países del mundo.
Se consolidó su ascenso con Juan Pablo II (1978-2005), que le hizo arzobispo. Benedicto XVI (2005-2013) le puso en 2011 lo designó en la poderosa Secretaría de Estado.
Lucha de poderes
El actual pontífice lo nombró cardenal en 2018 y prefecto para las Causas de los Santos. Un año más tarde, comenzaban los problemas vinculados a las causas del juicio.
Ante tales sospechas, Francisco lo cesó en septiembre de su cargo por su supuesta implicación en el caso. Becciu, por su parte, cree que “la aportación de las numerosas pruebas y testimonios” lograrán demostrar “su inocencia de toda acusación”.