El Registro Nacional de Trabajadores de la Economía Popular (RENATEP) entregó esta semana las primeras credenciales de trabajo a les vendedores ambulantes, lo que implica un reconocimiento a su tarea, pero no la habilitación para instalarse en un espacio público, ya que eso corresponde a cada jurisdicción. Además, en Once, Ciudad Autónoma de Buenos Aires, se habilitará un Centro de Acceso a la Justicia (CAJ) para atender cualquier irregularidad.
En diálogo con Nota al Pie, el Secretario General de la Organización Sindical Vendedores Libres, Omar Guaraz, expresó que cualquier proceso que brinde “un espacio para que los vendedores se puedan organizar, desarrollarse, nos parece súper positivo”, aunque remarcó que la solución es la regularización de la actividad.
En este sentido, si bien, la medida del RENATEP es un avance en el reconocimiento de les vendedores ambulantes como trabajadores de la economía popular, Guaraz opinó que “es solamente un carnet que los identifica”, ya que no implica un permiso para ejercer su trabajo.
“En los últimos años los vendedores fueron perseguidos, las represiones fueron variando de acuerdo a los municipios”, expresó el también mantero y vendedor ambulante. En la misma línea, manifestó que “la mayoría de los gobiernos a lo largo del país, lo consideran una contravención, una falta, por eso apelan al tema de la ilegalidad”.
El Secretario General de Vendedores Libres, perteneciente a la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA de los Trabajadores), mencionó la situación de les vendedores ambulantes de La Rioja Capital. Si bien allí están autorizades a ejercer su labor, este viernes se manifestaron frente al Concejo Deliberante de la ciudad, ya que una ordenanza municipal aumentó la tasa que deben tributar, y de 1500 pesos pasará a 15 mil y 20 mil pesos.
Respecto a Ciudad de Buenos Aires, afirmó que desde el primer desalojo en la Peatonal Florida en 2011 hasta ahora, “no existe ningún tipo de diálogo para intentar regularizar a los vendedores ambulantes” y expresó que ”Larreta quiere equiparar una contravención con un delito y quiere meter presos a los vendedores ambulantes”.
La pandemia y el agravamiento de una situación de antaño
El reconocimiento a les vendedores ambulantes llega en un momento en el que el Gobierno Nacional se encuentra implementando más restricciones a la circulación para disminuir los contagios de Covid-19. En este marco, Guaraz afirmó que, con la experiencia de 2020, en el que muchas actividades estuvieron frenadas, “la decisión unánime de los vendedores es ‘yo no me quedo más en casa, no me muero de hambre’”.
El Secretario General de Vendedores Libres afirmó que “la situación del gremio de los vendedores en concreto es muy complicada”, debido al contexto actual en el que muchas personas no pueden ejercer su trabajo, la clase política “debería poner todos los recursos del Estado para garantizar que la gente tenga derechos mínimos”.
Más adelante, Guaraz aseguró que “durante la primera cuarentena, el 80 por ciento de los vendedores no cobró el Ingreso Familiar de Emergencia” y agregó que espera “que estas restricciones de la cuarentena no afecten entre otros, el derecho al trabajo de centenares de miles de personas, y millones y millones de informales que, si no laburan, no comen”.