En el marco del 3J, fecha en la que se conmemora el Ni una menos, la asociación civil “La Poderosa” presentará de forma oficial el proyecto de ley que busca el reconocimiento salarial de las 70.000 cocineras comunitarias de Argentina,y sus derechos laborales. La presentación tendrá lugar este lunes frente al Congreso de la Nación.
Cabe resaltar que en el país hay más de 17 millones de personas en situación de pobreza y la inseguridad alimentaria se elevó al 23,3%. En los barrios, las ollas populares, los comedores comunitarios y los merenderos le hacen frente a la realidad.
Mujeres y disidencias trabajan todos los días en estos espacios dándole pelea al hambre y la desidia que habita los barrios. En este contexto, desde La Poderosa expresaron: “Queremos que toda trabajadora de comedor comunitario pueda cobrar, como mínimo, un salario mínimo vital y móvil”. “Estamos convencidos de que el trabajo comunitario salva vidas, construye redes, sostiene las barriadas populares, eso ¡también es trabajo!”, sostuvieron.
Nota al Pie dialogó con Lilian, vecina comunicadora y referente del Barrio 31, sobre la propuesta y lo que significa a nivel histórico.
La propuesta
“Este es un día histórico para nosotras; hace muchísimos años que nuestras madres, abuelas, y ahora nosotras le hacemos frente a la problemática del hambre”, afirmó Lilian.
Respecto al proyecto, comentó que el mismo se pensó en los barrios y en las asambleas de todo el país, con diferentes organizaciones y también con comedores y merenderos independientes. “Lo redactamos pensando en los comedores y los espacios comunitarios como lugares donde no solo se sirve un plato de comida, sino que también se acompaña situaciones de violencia y de consumo problemático, entre otras cosas”, explicó.
En un contexto de crisis social, con un 40% de personas en situación de pobreza y 2,4 millones de personas en la indigencia, son las cocineras quienes dan batalla a esta problemática. El carácter de urgencia de la situación se debe a que su labor es indispensable para que los grupos más vulnerados accedan a una alimentación digna.
Es por ello que la asociación propone la creación del Programa Nacional de Trabajadoras y Trabajadores de Comedores Comunitarios. Este consiste en reconocer y otorgar el Salario Mínimo, Vital y Móvil a quienes desempeñen un rol como trabajador o trabajadora en comedores y merenderos populares. A su vez, esta iniciativa es el puntapié para luchar por el reconocimiento de la importancia de todos los trabajos comunitarios.
Entre otros derechos básicos, el proyecto también exige el acceso a los aportes correspondientes para la jubilación, licencias por maternidad y por estudio para continuar formándose.
Quiénes cuidan a las que cuidan
El proyecto fue ideado también con una lógica feminista y de género, atendiendo a la realidad de que la gran mayoría de quienes trabajan en los espacios comunitarios son mujeres. Además, en muchos casos, realizan una triple jornada laboral entre los trabajos por fuera de los barrios de pertenencia, las tareas del hogar y las labores en los centros comunitarios.
En esta línea, Lilian afirmó: “La presentación del proyecto es histórica para nosotras porque generalmente nos llaman vagas, planeras, que vivimos del Estado”. “Es el Estado quien está viviendo gracias a nosotras, porque reconoce que existen los comedores pero no reconoce a quienes cocinan esas toneladas de comida con la mercadería que mandan”, continuó. A ello agregó que son ellas quienes cargan las ollas con kilos de comida y juntan “hasta basura para hacer fuego cuando no podemos comprar la garrafa”. “De repente piensan que es por arte de magia que la comida aparece en la mesa de las personas que se alimentan”, expresó.
Para finalizar, Lilian se dirigió al arco político, a los movimientos sociales y a las organizaciones feministas. “Les pedimos que nos apoyen porque este proyecto está pensado desde el feminismo de base, desde nuestros cuerpos que vienen soportando los golpes de cada crisis”, manifestó. “Somos nosotras las que ponemos la cara y le seguimos respondiendo a los vecinos cómo vamos a hacer para que una porción alcance para todos”, concluyó.
El proyecto será presentado de la mano de la diputada nacional Natalia Zaracho, del Frente Patria Grande. En lo que va del año, desde la asociación buscaron el apoyo de la gente a través de la junta de firmas. Las mismas serán fundamentales para expresar la voluntad popular y para que la iniciativa sea aprobada.