
Entre el compañerismo y la solidaridad, el curling en Argentina mantiene los valores y el espíritu amateur con el que nació en Escocia en la Baja Edad Media. Todos los lunes y jueves a las 20 horas, hombres y mujeres de todas las edades se reúnen en Fantasy Skate, una pista de hielo en Villa Devoto, Ciudad Autónoma de Buenos Aires para practicar uno de los deportes más singulares y desconocidos del país.
Nota al Pie estuvo en uno de los entrenamientos y habló con sus protagonistas y con Facundo Osa, periodista especializado en deportes de invierno y uno de los impulsores del proyecto, detrás de la cuenta de Instagram, @Argentina.curling.
El ambiente se siente incluso antes de pisar el hielo. Cada integrante tiene un rol y todos se ayudan entre sí. No hay jerarquías, aunque cuando aparece Alejandro Almada,entrenador físico y referente del grupo, es quien “marca un poco la cancha”, bromean entre ellos. Si alguien llega por primera vez, le enseñan con paciencia cómo colocarse los zapatos, cómo deslizarse y los fundamentos básicos del deporte.
Desde junio de 2025, la disciplina avanzó a pasos agigantados. Pasaron de entrenar una vez por semana a hacerlo dos veces, y cada encuentro suman más participantes. Consiguieron equipamiento gracias a Ramiro Berardo y el Columbus Curling Club de Ohio (una gran cantidad de zapatos, cepillos y una piedra). Además, avanza la creación de una Federación Argentina de Curling, que permitirá la futura participación del país en competencias internacionales.
¿Qué es el curling?

Es un deporte que se juega con dos equipos de cuatro personas en una pista de hielo de 45 metros de largo por casi 5 de ancho. En niveles más profesionales suelen ser cinco, porque se suma un jugador reserva. Cada jugador tira dos piedras por end o entrada (es como un game en tenis), para un total de 16 piedras por juego. En palabras de quienes los practican, es un deporte que puede hacer cualquier persona porque no requiere mucha capacidad atlética.
La meta del curling es dejar una piedra lo más cerca posible del “botón” del círculo central. Los últimos dos tiros siempre los realiza el capitán, que es el único que no barre. A su vez, se utilizan escobas especiales para barrer el hielo y modificar la trayectoria o la velocidad de la piedra, lo que añade un componente táctico y colaborativo distintivo.
Este deporte necesita equipación especial. Los zapatos cuentan con suelas diferentes: una antideslizante para el pie hábil y otra de teflón para el pie que se desliza. Se utiliza además un grip para caminar sin patinar.
Las piedras, por su parte, están hechas de un granito que solo se encuentra en una pequeña isla llamada Alisa Craig, frente a la costa de Ayshire en Escocia. No se rompen, no absorben agua y pueden resistir golpes durante más de 80 o 100 años”, explicó Pablo, uno de los participantes regulares.
El curling forma parte de los Juegos Olímpicos de Invierno desde Nagano 1998, aunque había aparecido como deporte de exhibición en ediciones anteriores. A diferencia de otros deportes, no existen selecciones nacionales permanentes, sino que los equipos se ganan el derecho a representar a su país según el criterio de cada federación.
Los comienzos del curling en Argentina

El proyecto para desarrollar el deporte y para la creación de una Federación nació en junio de 2025, impulsado por un grupo de 20 personas. “Había varios grupos chiquitos de gente interesada en traer el curling a Argentina, pero estábamos separados”, contó Facundo Osa. “En un momento, el presidente de la Federación de Hockey sobre Hielo me puso en contacto con Alejandro Almada. Él nos conocía a ambos y nos dijo: ‘che, los dos quieren lo mismo’”.
“Después, Ale trajo otros grupos de gente que quería practicar. Yo traje un grupo de gente de la web que en su momento había intentado hacer la Federación allá por 2010 y no pudieron. Y juntamos la gente necesaria, cada uno con su distinta expertise, tanto en temas de organizaciones de federación, experiencia”, detalló Facu. Ale podía aportar la experiencia en gestión deportiva dado que fue presidente de la Federación Nacional de Bádminton entre 2015 y 2019 y Facundo, por ejemplo, aporta en la parte de la comunicación.
Alejandro Almada es el presidente de la Federación, que aún está a la espera de la aprobación del estatuto presentado ante la Inspección General de Justicia (IGJ) para constituirse formalmente como Federación Argentina de Curling. Asimismo, ya establecieron contactos con World Curling y el Comité Olímpico de Argentina para empezar el proceso de reconocimiento oficial para poder obtener la membresía completa ante el organismo internacional.
En ese camino, la ayuda de Ramiro Berardo, cordobés residente en Ohio y jugador del Columbus Curling Club, fue clave. Berardo contactó a Osa por redes sociales y sacrificó sus vacaciones como profesor universitario para viajar al país y realizar la primera clínica de curling en Argentina, que permitió formar a los primeros practicantes locales.
En septiembre, Berardo participó junto a Romeo Gallo, Tim Kirk y Matthew Gallo del torneo End of Spiel en Fort Wayne, donde se convirtieron en el primer cuarteto con mayoría de jugadores argentinos en competir oficialmente. El equipo logró el subcampeonato del Evento D.
Entrenamientos en Fantasy Skate
Desde mediados de 2025, la pista de Fantasy Skate les abre las puertas dos veces por semana. Los lunes entrenan en grupos reducidos y los jueves la pista se llena. Comparten el espacio con equipos de hockey sobre hielo.
Pablo, uno de los regulares en Fantasy Skate, resaltó la importancia de Almada como impulsor del curling en Argentina y su gestión para conseguir el lugar: “Cuando se entera que abre esta pista, viene y empieza a hablar con el dueño. Habló varias veces y no quería y no quería. Le insistió hasta que aceptó y le dio una hora, que ahora son dos horas por semana”.
Aunque la pista de hielo para hockey y patinaje no está diseñada para practicar curling, “los jugadores realizan un tratamiento artesanal para lograr el pebble necesario para que sus características se asemejen lo máximo posible a las del hielo de curling, lo que permite continuar con la práctica y enseñanza del deporte de manera regular”.
Las equipaciones no son fáciles de conseguir. En este caso tuvieron la suerte de contar con Ramiro Berardo y su conexión con el Columbus Curling Club de Ohio que donó una piedra junior (más chica de la que se suele utilizar), escobas, zapatos y un hack móvil (se usa para darte impulso). En las próximas semanas esperan la llegada de dos juegos de piedras oficiales de tamaño reglamentario (32 en total), que adquirió Fantasy Skate.
La llegada de las nuevas piedras esperan que ayude a convocar más gente porque se podrán disputar partidos y entrenar mejor. “Ahora nosotros tomamos tipo entrenamiento porque aprendemos a salir. La verdad que nos vino bien, pues son 4 meses que lo único que hacemos es salir con una piedra. No tenemos otra cosa para hacer”, rescató Pablo sobre estos meses de entrenamiento.
Con las nuevas piedras van a poder hacer dos partidos paralelos de curling y pueden programar más cosas a realizar a futuro. Tienen previsto realizar el primer torneo de curling en Argentina. Aunque será de carácter exhibición, ya que la pista no cumple con las medidas reglamentarias de World Curling. Y, para el año que viene, piensan lanzar el primer circuito argentino de curling, con competencias regulares cada mes y medio en Fantasy Skate, “un paso clave hacia la consolidación de la disciplina en el país y la extensión del alcance del deporte”.
“Después de las vacaciones de invierno, vieron que cada vez se sumaba más gente y nos ofrecieron ampliar los horarios”, explicó Osa. “Incluso, Fantasy Skate, como organización, nos propuso que todos los equipos que surjan de nuestro grupo compitan por Fantasy en el futuro, cuando existan clubes formales.”
A su vez, uno de sus integrantes más chicos comentó que quieren una especie de inferiores: “Ahora estamos intentando buscar algún tipo sub 15 de mi edad, digamos, para traer más que vengan a entrenar constantemente. La idea es tener varios que vengan acá a entrenar para ir armando un equipo por edades, ir armando sub 15 y después ir expandiendo”. Esta idea adquiere importancia ahora que la World Curling Association abrió categorías nuevas a las que Argentina podría entrar mucho más fácil que hace unos meses.
Además, a varios de los integrantes los invitaron a Brasil, según destacó Pablo: “La ida a San Pablo es medio así social. Hay un torneo allá, vamos, no a participar, a conocer, a ver la pista de ellos, a hacer un poquito de camaradería”. Otra de las novedades para estos últimos meses del año es la llegada de un entrenador austríaco con experiencia olímpica que se ofreció a darles algunas clases y ofrecer asesoramiento técnico, según Pablo.
El curling argentino avanza gracias al esfuerzo colectivo, la constancia y la voluntad de un grupo que decidió transformar la curiosidad en proyecto. Lo que empezó como un sueño ya consiguió el primer equipo en representar a Argentina, más equipamiento, y está cada vez más cerca de crear una Federación que puede llevar el deporte a otro nivel.

