
Israel Katz, ministro de Defensa, aprobó la noche del 19 de agosto el plan presentado por las Fuerzas de Defensa (FDI) para tomar Ciudad de Gaza y movilizó 60.000 reservistas adicionales, según confirmaron medios como DW y Middle East Eye. Además, otros 70.000 soldados deberán extender su servicio entre 30 y 40 días.
El plan incluye “preparativos humanitarios” para evacuar cerca de un millón de personas, muchas de ellas ya desplazadas, lo que según expertos podría derivar en una crisis humanitaria sin precedentes en la región.
Escalada militar y destrucción
El miércoles 20 de agosto, cazas israelíes intensificaron los bombardeos sobre el norte de Gaza, incluyendo barrios residenciales de Jabalia y Zeitoun, provocando la muerte de al menos 35 personas, entre ellas civiles que esperaban asistencia humanitaria.
Según informó Haaretz, la fase inicial de la ocupación ya comenzó, mientras Israel sostiene que busca desmantelar a Hamás y liberar a los rehenes del ataque del 7 de octubre de 2023. Sin embargo, la estrategia implica la destrucción masiva de viviendas, el desplazamiento forzado de miles de personas y un aumento de la tensión humanitaria.
Rechazo al alto el fuego y señales contradictorias
A pesar de que Hamás aceptó recientemente un acuerdo de tregua mediado por Egipto y Catar, Israel ha mostrado desinterés en esta posibilidad. El portavoz del gobierno, David Mencer, afirmó a la BBC que no están interesados en “acuerdos parciales” y que “el primer ministro ha delineado un plan para el futuro de Gaza”. Así afirmo el portal Middle East Eye
Analistas advierten que la negativa israelí a considerar la tregua intensifica la violencia y genera una escalada que afecta principalmente a la población civil.
Apoyo internacional y polarización
El presidente estadounidense, Donald Trump, respaldó la ofensiva israelí, instando a que Hamás sea “confrontado y destruido” para recuperar a los cautivos. El apoyo de potencias externas legitima, según críticos, una estrategia militar que prioriza objetivos políticos y de seguridad israelíes por encima del derecho humanitario internacional.
Mientras Israel avanza hacia un posible control total de Gaza, la comunidad internacional observa con preocupación el riesgo de una catástrofe humanitaria que ya afecta a miles de palestinos.