
Elon Musk anunció oficialmente el lanzamiento de Grok 4, la última evolución de su sistema de inteligencia artificial creado por la empresa xAI. Esta versión representa un salto significativo respecto a sus predecesores, integrando un modelo fundacional completamente nuevo —Grok-4L— que, según el propio Musk, se encuentra «entre los mejores del mundo».
Entre sus mayores atributos se destacan su velocidad, precisión y un nivel de razonamiento que alcanza el umbral de «nivel humano», según tests internos. Grok 4 ya está disponible para los suscriptores del plan X Premium+ a un costo mensual de 300 dólares.
A diferencia de versiones anteriores, esta integración permite a Grok interactuar directamente con el contenido en tiempo real de la plataforma X, lo cual lo convierte en una herramienta especialmente poderosa en el terreno de la actualidad, los mercados y la política.
¿Qué cambia con Grok 4?
Una de las principales diferencias respecto a Grok 3.5 y sus versiones previas es el cambio de arquitectura: Grok 4 se sustenta en un nuevo modelo de lenguaje (LLM) entrenado desde cero, con capacidades significativamente superiores en comprensión, lógica y generación de texto.
Musk destacó que Grok 4 puede rendir exámenes académicos de alto nivel y resolver problemas que hasta ahora estaban fuera del alcance de la IA generalista. Otra diferencia clave es el acceso nativo a X, lo que permite a Grok manejar datos actualizados al instante.
Esta particularidad supera incluso a modelos como ChatGPT, que dependen de navegación externa o actualizaciones periódicas. También se ha mejorado la interfaz y se ha reducido la latencia, haciendo que el sistema responda con mayor fluidez.
Un modelo con sello Musk: exclusivo, costoso y disruptivo
Al igual que otros productos impulsados por Elon Musk, Grok 4 no está exento de controversia. El costo elevado de su suscripción y la integración casi total dentro del ecosistema de X refuerzan la idea de que Musk busca centralizar el poder tecnológico bajo su plataforma.
Esto pretende convertirla no solo en una red social, sino en un entorno todo-en-uno potenciado por inteligencia artificial. No solo representa una mejora tecnológica, sino también un cambio de paradigma: ya no es solo un chatbot, sino una interfaz avanzada de interacción en tiempo real con el mundo digital, diseñada bajo la visión ambiciosa de Musk para fusionar IA y redes sociales.