Desde 2015, la Ciudad de Buenos Aires viene incorporando invernaderos hidropónicos tecnificados, brindando a estudiantes y docentes una innovadora forma de cultivar alimentos sin necesidad de utilizar tierra. Esta iniciativa, impulsada por el Programa Escuelas Verdes, combina tecnología y educación ambiental, promoviendo prácticas agrícolas sostenibles en entornos urbanos.
La hidroponia, cuya práctica ya se lleva a cabo en seis escuelas porteñas, es un método de cultivo que prescinde del suelo, utilizando soluciones minerales para nutrir las plantas. En las escuelas participantes, se emplea la técnica NFT (Nutrient Film Technique), donde una fina película de solución nutritiva circula continuamente por canales, permitiendo que las raíces absorban los nutrientes esenciales para su crecimiento.
Este sistema favorece un desarrollo más rápido y saludable de los cultivos. Estos invernaderos funcionan como laboratorios vivos, donde estudiantes de diversos niveles educativos no solo siembran y cosechan, sino que también registran cambios en las plantas, monitorean variables como el pH del agua y la conductividad eléctrica, y ajustan la dosificación de nutrientes según las necesidades del cultivo.
Resultados de la hidroponia en la Ciudad: otras alternativas eficientes
Durante el Ciclo Lectivo 2024, se cosecharon alrededor de 150 kg de hortalizas y aromáticas, incluyendo pak choi, lechuga, perejil, cilantro y acelga, que fueron distribuidas entre la comunidad educativa. Además de los invernaderos tecnificados, aproximadamente 39 escuelas de la Ciudad adoptaron la técnica de raíz flotante, una variante hidropónica accesible que utiliza materiales reciclables como telgopor y plástico para construir módulos de cultivo.
En este sistema, las raíces de las plantas flotan directamente en una solución nutritiva contenida en un recipiente, facilitando su implementación en espacios reducidos o con suelos no aptos para la agricultura. Además, la colaboración entre instituciones también ha sido clave en el desarrollo de estos proyectos.
Por ejemplo, el Programa Escuelas Verdes, en conjunto con la Escuela Técnica N.°08 D.E 13 «Paula Albarracín de Sarmiento», facilitó la elaboración y entrega de nutrientes hidropónicos. Estudiantes de dicha escuela técnica producen las soluciones nutritivas en sus laboratorios, integrando conocimientos teóricos y prácticos en un contexto real.
La implementación de la hidroponia en las escuelas de la Ciudad no solo promueve la producción de alimentos saludables y sostenibles, sino que también enriquece la educación ambiental, fomenta la agroecología y fortalece la conexión de los estudiantes con la naturaleza. Estas experiencias prácticas contribuyen a formar una juventud más consciente y comprometida con el cuidado del medio ambiente.