Los buenos, los malos y los feos
El Presidente siguiรณ las reglas del discurso polรญtico. Definiรณ a sus destinataries, sus receptores positives del mensaje: los โargentinos de bienโ. Definiรณ a sus enemigues: se burlรณ de los 30.000 desaparecides y fustigรณ a la izquierda, las organizaciones sociales, Roberto Baradel, Sergio Massa, Juan Grabois, Mรกximo Kirchner, Moyano (no aclarรณ cuรกl, probablemente todos), Cristina Kirchner, la casta, periodistas y gobernadores sin nombre.
Si aplicamos el marco conceptual de Ernesto Laclau, tanto la โcastaโ como los โargentinos de bienโ son el nuevo gran significante vacรญo de esta รฉpoca. Al no tener un significado fijo, cualquiera puede sentirse interpelade. Ademรกs, su interpretaciรณn cambia segรบn la audiencia y el discurso, esa es la gran utilidad del significante vacรญo.
Pero en este discurso encontramos algunas precisiones. Les argentines de bien son la โmayorรญa silenciosaโ que lo votรณ: los que trabajan, los que producen, los peones rurales, los comerciantes, los cuentapropistas, los trabajadores informales, los jรณvenes desempleados, las amas de casa. Nรณtese que en este imaginario las mujeres, mencionadas solamente dos veces, se quedan en el hogar para educar a las generaciones futuras. Los hombres, no.
Finalmente, Milei definiรณ el tercer componente del discurso polรญtico, los paradestinatarios, ese receptor del mensaje que estรก en disputa. Que puede ser tanto positivo como negativo. En esa arena movediza se ubican los gobernadores y polรญticos. Milei, aquรญ, se arriesga discursivamente, pierde solidez. A la misma gente a la que demoniza, a la casta, luego les abre la puerta, invita a deponer intereses personales, los invita a un nuevo pacto.
ยฟPactar con la casta? Pide tiempo, endulza los oรญdos de cordobesas y cordobeses cuando habla de โla Doctaโ. El entusiasta fan de Donald Trump recuerda de golpe el 25 de mayo, futura cita para la refundaciรณn sobre los diez principios liberales. Negocia en vivo y en directo con los gobernadores: primero, antes del Pacto, firmen la ley base y el paquete de alivio fiscal, dice Milei. En cรกmara, los gobernadores en el recinto dejan de sonreรญr, no los vemos mรกs durante la emisiรณn.
Omisiones sonoras
En educaciรณn se habla de โcurriculum ocultoโ como aquello que se transmite en el aula de manera implรญcita, sin ser enunciado. Es muy difรญcil de ver y muy rico de analizar. Podemos trasladar eso al discurso polรญtico. ยฟQuรฉ omitiรณ Milei? Ademรกs del mรญnimo rol adjudicado a la mujer, la gran perdedora en el discurso de anoche es la cultura. No existe para รฉl. No la menciona, excepto una vez, peyorativamente, en un sentido restringido. No habla nunca del teatro, cine, mรบsica, ninguna de las artes.
La ciencia tampoco es mencionada. Ni una vez. Habla de premios Nobeles desde la nostalgia, los cita para denostar el sistema educativo actual (negociado de la polรญtica y zurdo anticapitalista). Pero no habla del sistema nacional de ciencia, de su importancia para el desarrollo de una Naciรณn. Argentina manda satรฉlites al espacio, fabrica reactores nucleares, exporta conocimiento.
Sin embargo, ni una palabra sobre el congelamiento de los ya de por sรญ mรญseros salarios de los cientรญficos, quienes no ven mรกs salida que retomar la senda del brain drain, la fuga de cerebros. Los paรญses centrales los reciben con los brazos abiertos: trabajo intelectual altamente calificado. Sin invertir un peso en su formaciรณn, los ponen a trabajar en sus naciones, patentan sus hallazgos. Luego nos los venden.
Anoche no apareciรณ la palabra desarrollo ni industria. Milei habla de apertura de comercio internacional, volver a ser protagonistas del mercado global. Pero, ยฟde quรฉ manera? No hay la mรกs mรญnima traza de un proyecto nacional de desarrollo econรณmico. Absolutamente nada. El vacรญo discursivo sobre este punto, a tres meses de gobierno, deberรญa preocupar a sus ajustados votantes.
ยฟEn quรฉ se sustenta el pedido de sufrimiento cuando no hay ni una seรฑal de cรณmo aliviarlo? La apertura puede servir a unos pocos, los exportadores. Eso no genera trabajo ni riqueza, solo la entrada de algunos dรณlares. Enceguecido por desarrollar el diagnรณstico del desastre heredado, Milei omite hablar de proyecto. Y eso dice mucho.
Una tribuna de cortesanas y cortesanos
Milei fustiga el populismo, lo critica, para รฉl es una de las plagas de Egipto. Sin embargo, el montaje del espectรกculo de ayer, digno del circo romano, recuerda a los manejos propagandรญsticos de los totalitarismos. Premio para el director de cรกmaras, logrรณ la simulaciรณn de un apoyo incondicional a cada palabra del orador.
A falta de legisladores, apostaron cรกmaras tribuneras, donde los exaltados concurrentes festejaban la retรณrica del ajuste. Los demรกs planos los completaban miembros del gabinete, Fuerzas Armadas y por supuesto la infaltable Karina. Con ese montaje, el Presidente falseรณ un apoyo inexistente tanto en el Congreso, donde es minorรญa, como en la calle, poblada por la policรญa y por la izquierda.
El culto a la imagen, creado el siglo pasado por Mussolini, Hitler, los lรญderes soviรฉticos y chinos, Perรณn, Fidel y tantos otros, es abrazado por Milei. Fan de los gestos (boquita fruncida, pulgares levantados) y รกngulos controlados (plano picado de arriba abajo anti papada), de cuidadosamente despeinada peluca, patilla de prรณcer en homenaje a su venerado Menem, aรบn teme al pรบblico.
Controla su imagen pero no su cuerpo. Por eso ayer se afianzรณ al atril y no lo soltรณ. Lo vimos cรณmodo con la lectura: cuando se trata de ametrallar con palabras para confundir, รฉl se traba al hablar, se irrita. Al leer no pierde la senda. Los aplausos lo ablandaron, lanzรณ algunas sonrisas aprobadoras a las y los cortesanos.
Dicen que los ojos son el espejo del alma. Tal vez por eso Milei decidiรณ que el encuadre principal, รฉl su lectura, fuera tambiรฉn un plano picado. La cรกmara no mostraba su rostro de manera frontal. Entonces, no pudimos ver sus ojos, su alma nos evitรณ mientras anunciaba sus catรกstrofes.