โยฟAlguien va a tirar manta a la Plaza San Martรญn hoy?โ, es una pregunta comรบn en un grupo de WhatsApp de emprendedores. Lo conforman 270 personas de la capital bonaerense, La Plata, y se refieren a la posibilidad de vender ropa usada en la plaza del centro platense.ย
Es una imagen comรบn que comenzรณ en ciertos espacios de la ciudad, pero ahora invade los tres espacios verdes principales que atraviesan la Avenida 7, arteria neurรกlgica de la localidad. Tanto en la Plaza Rocha, San Martรญn e Italia se pueden ver decenas de gazebos blancos con cientos de perchas que ofrecen ropa de segunda mano. A su alrededor, coexisten otras tantas mantas en las que les emprendedores muestran sus objetos, tambiรฉn de feria americana.
Pero el comercio de indumentaria con una segunda oportunidad no queda ahรญ. En los numerosos showrooms y ferias que afloran en La Plata los fines de semana, cada vez mรกs puestos son de venta de ropa usada. A su vez, la prรกctica se normalizรณ en los grupos de compra y venta en redes sociales.
Nota al Pie dialogรณ con Sofรญa, de Tienda Hermanis, y Jacqueline, representante de la feria de ropa usada en la Plaza San Martรญn. Ambas contaron los beneficios de esta forma de intercambio, amigable con el bolsillo y el medio ambiente.
Del fast fashion al tesoro vintage
La moda rรกpida (mรกs conocida como โfast fashionโ), se centra en la producciรณn de prendas al por mayor, lo mรกs rรกpidamente posible, en respuesta a las tendencias del momento. Segรบn un informe que realizรณ en 2023 el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), desde el aรฑo 2000 se duplicaron la cantidad de prendas que se produjeron.
Este es uno de los motivos por los que la industria de la moda es responsable del 10% de las emisiones mundiales anuales de carbono, confirmaron las estadรญsticas del mismo estudio.
En eso pensaron las chicas de Tienda Hermanis al comenzar su emprendimiento de indumentaria usada, a principios de 2023. โSurgiรณ como una posibilidad que encontramos con mi mejor amiga para ayudar al medio ambienteโ, explicรณ Sofรญa. โAsรญ le dimos un nuevo uso a la ropa que ya tenรญamos, que era mucha y ya no รญbamos a usarโ.
De esta forma, comenzaron a revisar en su ropero y sacar las prendas que habรญan quedado en el olvido. Con una pequeรฑa mesa y perchero prestado de madera, fueron a su primera feria. Y se dieron cuenta que era un negocio redituable.
โNos vimos tambiรฉn en un contexto sociopolรญtico que nos llevรณ a intentar conseguir una fuente de dinero extra y nos pareciรณ una buena idea por todos ladosโ, agregรณ Sofรญa. โAdemรกs, tenรญamos ganas de crear algo juntasโ.
Ahora continรบan participando de ferias de emprendedores en la ciudad de las diagonales, y vendiendo las prendas a travรฉs de su pรกgina de Instagram. Ya no solo es su ropa, sino la de familiares y amigues que se sumaron a la propuesta.
Sofรญa explicรณ que la venta de ropa de segunda mano da resultado, ya que es una prรกctica a la que cada vez la gente se inclina mรกs. โEs una tendencia que con los aรฑos creciรณ y las personas se dieron cuenta de que existen cosas muy originales, lindas y de calidad que pueden encontrar en tiendas de ropa usadaโ, se alegrรณ.
En este sentido, nombrรณ algunos de los beneficios que tiene la prรกctica. Por un lado, el cuidado del medioambiente, mediante la reutilizaciรณn de prendas que ya existen, para no fabricar nuevas y generar mรกs contaminaciรณn. Por otro, el costado econรณmico, ya que se encuentra ropa mรกs barata y en buen estado, al mismo tiempo que se apoya a emprendimientos locales.
La lucha por la permanencia
La Plaza San Martรญn en La Plata estรก rodeada por edificios gubernamentales. Quienes la cruzan para llegar a sus trabajos, se encuentran con una feria de venta de ropa usada que se convirtiรณ en un clรกsico de la ciudad.
Nota al Pie dialogรณ con Jacqueline, una de las referentes de la feria que comienza en las calles 7 y 53. โHoy cumplimos dos aรฑos desde que volvimos a la plaza y nos pudimos reacomodarโ, explicรณ. Es que les feriantes tienen una larga historia de lucha con el Gobierno municipal para permanecer en el lugar.
โNos costรณ muchรญsimo trabajo, porque cuando nos desalojaron fue muy complicado conseguir un espacio para seguir trabajandoโ, recordรณ. โHicimos numerosas marchas y amparos, hasta que hace dos aรฑos atrรกs nos ofrecieron un convenio para volver a la plaza con algunas condicionesโ.
Una de ellas fue que les emprendedores llevaran sus propios gazebos. Pero Jacqueline contรณ que eso ya estaba en sus planes, ya que habรญan presentado un proyecto para llevar sus propias estructuras. Cuando se aprobรณ, empezaron a comprar los materiales.
โNos pedรญan muchos requisitos, tanto acerca de las medidas del espacio, el modelo de cรณmo tenรญa que ser el gazebo, que solo tuvieran lonas blancasโ, afirmรณ Jacqueline. โAdemรกs de todo eso, que sรณlo vendamos ropa usadaโ.
Pero eso a elles no les molestรณ, ya que fue su pelea histรณrica. โQueremos demostrar que se puede reciclar y darle a la ropa una segunda oportunidadโ, se alegrรณ la feriante. โEs lo que vendimos siempre y vamos a seguir haciendoโ.
Y tienen un pรบblico fijo. Jacqueline explicรณ que la gente siempre compra indumentaria usada. โA muchas familias numerosas les sirve esta propuesta, en comparaciรณn a los precios de una remera, un pantalรณn, la ropa de chicos, los calzadosโ, asegurรณ.
Las prendas que se encuentran en la Plaza San Martรญn estรกn en buen estado. Entre sus perchas hay indumentaria para todos los gustos, y muchas joyas vintage. Se les puede encontrar los lunes, miรฉrcoles y viernes, desde las 9 hasta las 18:30.