En la noche del pasado domingo, se incendió parte de la estancia “El Relincho”, a metros de donde se encuentra el polémico radar estadounidense de accionistas británicos en Tolhuin, Tierra del Fuego.
Las llamas tomaron una pequeña vivienda ubicada en el casco de la estancia, la cual estaba deshabitada.
Hace dos meses, el Ministerio de Defensa solicitó, a través de un informe, el desmantelamiento del radar de la empresa LeoLabs Argentina S.R.L, de origen estadounidense con capitales británicos. Pese al pedido, no hubo ninguna modificación.
El escrito detalla que el 15 de noviembre de 2022 el titular de la Subsecretaría de Telecomunicaciones y Conectividad de la Jefatura de Gabinete de Ministros “autorizaba, con carácter precario, a la empresa LeoLabs Argentina a instalar y poner en funcionamiento una Estación Terrena en Banda S”.
La misma, tenía como objetivo “rastrear y monitorear objetos en ambiente LEO (órbita terrestre baja, por sus siglas en inglés), de acuerdo al Anexo Técnico que forma parte integrante dela medida”, explica el comunicado.
A su vez, afirmaron que esta autorización fue realizada “sin dar aviso previo al Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto, ni al Ministerio de Defensa”.
En consecuencia, dispusieron que, una vez finalizadas “las etapas de ensayos y calibración de los equipos” la empresa deberá gestionar los registros correspondientes de homologación por parte del Ente Nacional de Comunicaciones.
Esta situación promovió la preocupación incluso de ex combatientes de la provincia, que se reunieron con el gobernador Gustavo Melella y acordaron enviar una nota al Jefe de Gabinete de Ministros de la Nación, Agustín Rossi, para que se efectivice el pedido del Ministerio de Defensa.
Melalla estuvo reunido con el presidente del Centro de Ex Combatientes de Malvinas en Ushuaia, Conrado Zamora y el presidente del Centro de Veteranos de Guerra Malvinas Argentinas de Río Grande, Raúl Villafañe, según informó InfoBaires24.
La amenaza que representa el radar en territorio argentino
El informe elaborado por el Ministerio de Defensa cuenta con 22 fojas y fue elaborado junto con la empresa de sociedad de Estado INVAP, la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE) y el Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas (EMCO), entre otros.
El mismo lleva la firma del ministro de Defensa, Jorge Taiana, y solicita “la cancelación y suspensión definitiva de la instalación y puesta en funcionamiento de la Estación AGSR de LeoLabs Argentina”.
Esto se debe a que entienden que la misma “vulnera la seguridad nacional” y que es “incompatible con la Directiva de Política de Defensa Nacional (Decreto 457/2021)”.
A su vez, consideraron que la instalación del radar se llevó a cabo en “un lugar estratégico para nuestro país como lo es la localidad de Tolhuin, Provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur”.
Otro de los potentes argumentos, señala: “Soberanía y Defensa nacional son conceptos inseparables de la actividad espacial”. Y agrega que “no es posible dejar de lado las connotaciones geopolíticas”.
En este sentido, el escrito destaca que se trata de “una empresa con domicilio legal en Gran Bretaña cuando el Reino Unido sostiene la ocupación ilegal de las Islas Malvinas, parte de nuestro territorio nacional”.
En consecuencia, la instalación del radar le permitiría al Reino Unido “brindar alerta temprana y Conciencia Situacional Espacial en la órbita baja en la Argentina”. Y señalan que así, podrían “monitorear la actividad satelital argentina tanto civil como militar”.
Por otro lado, se afirma que podrían “interceptar datos y observar objetivos terrestres, marítimos o detectar aeronaves”. Además que la banda de operaciones declarada por la empresa coincide con las de emisión y recepción de los satélites argentinos.
Asimismo, afirman que pueden “hacer seguimiento de trayectorias y lanzamiento de los vectores Tronador que nuestro país se encuentra desarrollando desde la CONAE”.
En tanto, informan que el radar opera las 24 horas de forma automática “remitiendo datos digitalizados, y probablemente encriptados, vía conexiones redundantes de Internet a un centro de operaciones ubicado fuera de nuestro país”.
Con esta información, aseguran que LeoLabs “estaría en condiciones de brindar inteligencia sensible de la Argentina al Reino Unido o a cualquier otro Estado”.