Este miércoles Google indicó en su blog que una nueva política de anuncios regirá a partir de noviembre. La medida va a obligar a los anunciantes de campañas políticas a acompañar sus publicaciones con una información “clara y visible” en el caso que se haga uso de inteligencia artificial para producir esta clase de contenidos.
La nueva disposición, que afectará a la difusión de campañas electorales, incluye a los contenidos de video, imagen y audio que hayan sido alterados por medio de las IAs en todas las plataformas de la compañía. La explícita aclaración exigida por Google debe “estar ubicada en algún lugar donde los usuarios puedan notarla”.
El uso de la inteligencia artificial generativa abrió la puerta de acceso a herramientas de programación y diseño con mayores capacidades creativas. Estas nuevas herramientas de IA son útiles para generar contenidos como videoclips, guiones para películas, sonidos e imágenes para distinto tipo de anuncios.
Los “deep fakes”, elaborados en base a algoritmos, debilitan la frontera entre la realidad y la ficción. Si bien los clips de audio, videos o imágenes falsas son moneda corriente en la publicidad política, las IAs, producen efectos más realistas que pueden dificultar a los votantes distinguir entre lo verdadero y lo falso, o inducir a equívocos.
¿A quiénes afecta la nueva política de Google en lo inmediato?
La implementación de la nueva medida de Google tendrá lugar un año antes de los comicios electorales de los Estados Unidos, a desarrollarse en noviembre de 2024. Esta decisión es un claro indicador del impacto que las nuevas tecnologías generativas comienzan a tener en el ámbito de la comunicación política.
Latinoamérica no escapa a la nueva disposición y el marketing político se ve más apremiado en la medida que se aproximan elecciones presidenciales en Ecuador y Argentina. En Guatemala rige la segunda vuelta, se acercan los comicios regionales de Colombia y aguardan las internas para elegir candidates en México. Estos procesos electorales ocurren antes de finalizar este 2023.
Una de las razones que motivaron la actualización de las medidas de transparencia de Google fueron las críticas que recibió esta firma por desinformación en sus plataformas. Estos cuestionamientos llegaron doce meses antes de que los ciudadanos de Estados Unidos elijan a su próximo presidente el 5 de noviembre del próximo año.
En este sentido, la empresa encargada de la ciberseguridad “Mandiant”, perteneciente a Google, advirtió en el mes de agosto, que en los últimos años se estuvo registrando un uso “creciente de la IA para realizar campañas informativas manipuladoras en línea”, así lo informó la Agencia Reuters.
Política de restricciones y ventajas de las IAs
Google aclaró que no prohibirá las IAs por completo en la publicidad política. “Las excepciones a la prohibición incluyen contenido sintético alterado o generado de una manera que no tenga consecuencias para las afirmaciones hechas en el anuncio”.
Además, será legítimo utilizar la inteligencia artificial en técnicas de edición como el reajuste y el tamaño de las imágenes, los recortes, el color y las correcciones de defectos o edición de fondos.
El gigante de los motores de búsqueda y de la publicidad en las redes comunicó que “cualquier contenido sintético que sea irrelevante para las afirmaciones efectuadas en el anuncio quedará exento de los requisitos de divulgación”.
Por otro lado, más allá de todos los riesgos señalados, la inteligencia artificial generativa le permite a grupos y organizaciones con recursos limitados crear contenidos con una mayor calidad y a mayor escala, acorde a lo que informó Mandiant.
Por el momento, sólo se han visto ejemplos de elementos que impactan en el votante de manera directa. Pero la inteligencia artificial, también, conlleva transformaciones en los métodos y dinámicas de trabajo para los equipos de campañas que tienen que realizar tareas que llevan mucho tiempo y ahora pueden automatizarse y tornarse más ágiles.