El arte no sólo permite vivir experiencias de disfrute, también puede ser instrumento para recordar la historia y visibilizar la impunidad. Esa es la clave que define a “Muerte accidental de un ricotero”, una obra que vuelve a escena y aborda la muerte del joven Walter Bulacio.
Nota al Pie dialogó con el director y creador de la obra, Luciano Ferrari, quien brindó detalles acerca de cómo surgió la idea y el proceso de construcción.
Sobre “Muerte accidental de un ricotero”
La misma es una adaptación de la obra “Muerte accidental de un anarquista” de Darío Fo. Al respecto, Ferrari explicó cómo fue el proceso para adaptar la historia de Bulacio a la puesta original. “Al leer la obra original se me ocurrió la idea de adaptarlo a un caso argentino, sobre todo el de Walter Bulacio, que es tan emblemático por todo lo que pasó. Esto surgió después de 2014, junto a Daiana Kiernan”, explicó el entrevistado.
Para llevar a cabo el proyecto, Ferrari junto a su equipo iniciaron una investigación sobre el caso de Bulacio. Así el realizador detalló que “hubo varias etapas y la primera fue ir a ver lo que decía la prensa. Fuimos a buscar diarios viejos, y después tuvimos comunicación con la abogada que tuvo el caso de Walter”.
Asimismo, la familia de Bulacio también hizo su aporte para el desarrollo de la puesta. En ese sentido, Ferrari celebró: “Por suerte se abrieron muchas puertas para poder informarnos lo mejor posible y hacer una obra que no falte a la verdad”.
Contexto histórico
Walter Bulacio era un adolescente que en la noche del 19 de abril de 1991 se encontraba en las inmediaciones del show que dio Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota en el estadio Obras Sanitarias. Ese mismo día fue detenido por fuerzas policiales y pasó la noche en la comisaría sin una causa comprobable.
Una semana después, tras su paso por diferentes hospitales, Bulacio falleció. Esto último inició una causa judicial, ya que su cuerpo presentaba golpes y traumatismo de cráneo. Con el pasar de los años y del desarrollo de la causa, aún no hay responsables condenados, pero su muerte se convirtió en lucha contra la violencia institucional.
En este aspecto, el director de la obra, que gira en torno a su historia, reflexionó sobre la función social que puede cumplir el arte. “Para mí el arte si no es para mejorar las cosas no tiene razón de ser. Para desmantelar mentiras y por eso está obra. Es una posibilidad de mantener vigente el nombre de Walter y su historia”.
A su vez, Ferrari se refirió a lo que significa tanto para él como para el equipo llevar adelante una obra de estas características. Sobre ello, afirmó que “para nosotros seguir mostrando estas cosas es importante”.
Un esfuerzo colectivo
El elenco detrás de “Muerte accidental de un ricotero” está conformado por les artistas: Santiago Avena, Alfredo Deri, Lautaro Ayerdi, Nicolás Coronel, Juan Manuel Palavecino y Rocío Jara.
Además de les artistas que dan vida a la obra, también se destaca la labor de todo el equipo técnico y de Luciano Ferrari como director de la puesta. En este punto, el realizador reflexionó sobre el hecho de llevar a cabo el proyecto de forma independiente.
“Al principio fue muy difícil porque siempre nos manejamos como un proyecto autogestivo. Esta vez lo estamos encarando también así. Estamos juntando dinero por medio de rifas, festivales y los chicos también hacen intervenciones en los subtes”, comentó el director de la obra.
A pesar de las dificultades, el realizador destacó las ganas de todo el equipo de llevar adelante la obra. Asimismo, agradeció a les artistas y las personas que se sumaron para acompañar el proyecto y que este vuelva a los escenarios.
En ese sentido, el entrevistado anticipó que para los próximos meses tienen confirmadas funciones en el Teatro Border de Buenos Aires. En cuanto a los próximos planes y expectativas, Ferrari concluyó: “En diciembre vamos a hacer una función a beneficio en una escuela a definir y la idea es poder pasear la obra por el país”.