Este martes dio inicio la sexta y última jornada de la fase de grupos de las copas Conmebol Libertadores y Sudamericana para cuatro equipos argentinos. En la primera competición, River y Patronato se jugaron sus últimas fichas para conseguir sus respectivos objetivos. En tanto, por Copa Sudamericana, San Lorenzo y Tigre apostaron todo en la búsqueda de posibles goleadas a favor.
Por un lado, River venció en su casa a The Strongest en un áspero partido y selló su clasificación a los octavos de final. Mientras tanto, en Colombia, Patronato dio la sorpresa y derrotó por la mínima a Atlético Nacional para abrochar el pasaje a los 16avos de final de la Copa Sudamericana.
Además, San Lorenzo goleó como local a Estudiantes de Mérida y gracias a otro resultado consiguió el boleto a la siguiente instancia de la competición. Por último, Tigre cayó en Brasil frente a São Paulo y pasó a la siguiente fase como el segundo de su grupo. Ahora ambos equipos argentinos deberán esperar el sorteo para conocer sus posibles rivales provenientes de la Copa Libertadores.
River ganó en casa y ya piensa en los octavos
El “Millonario” recibió en el estadio Monumental a The Strongest con la obligación de ganar para depender de sí mismo en la búsqueda de la clasificación. En un encuentro complicado, donde el rival estuvo concentrado y no se achicó, el conjunto argentino venció 2-0 y se aseguró su presencia en la próxima instancia de la Copa Libertadores.
El cotejo, que tuvo el arbitraje del uruguayo Gustavo Tejera, inició con dominio local, donde a los 13’ se abrió el marcador con un golazo de Rodrigo Aliendro. No obstante, el trámite tras el tanto riverplatense no se inclinó para los de Núñez y la visita dio cátedra de ser un equipo duro y difícil para competir.
Luego del gol del mediocampista, River tuvo diversas situaciones en el primer tiempo pero sin peligro por finalizarlas con disparos desviados. Sin embargo, el equipo boliviano tuvo dos chances muy claras sobre los 30’ con remates desde afuera del área que provocaron una buena reacción de Franco Armani.
Con un ambiente de superioridad en el control de juego por parte del local, no se modificó el resultado en los primeros 45’. El complemento vislumbró la misma imagen en los 20’ iniciales, donde River desperdició varias ocasiones para ampliar la ventaja por falta de precisión.
Por su parte, la visita no pudo hacer pie en el segundo tiempo y se quedó como una sombra que corría siempre detrás de la pelota. Sin chances de igualar el tanteador, sobre el final llegó el segundo de River para liquidar el encuentro. Miguel Borja empujó a los 90’, dentro del área chica, un remate de Santiago Solari y selló la clasificación del Millonario para los octavos de final.
Patronato logró el milagro en Colombia
El combinado argentino jugó con un solo objetivo, lograr el pasaje a los 16avos de final de la Copa Sudamericana y sobre el final obtuvo su premio. En la última fecha de grupos visitó a Atlético Nacional con la meta de obtener un triunfo y esperar una caída de Melgar. En todo momento el “Patrón” se mostró a la altura del partido, el cual contó con el arbitraje del brasileño Paulo Zanovelli da Silva.
La primera etapa tuvo oportunidades claras para ambos bandos con una misma sinfonía: hicieron figura a los arqueros rivales. El guardameta local, Kevin Mier, sacó dos tiros rasantes; mientras que por el lado argentino, Julio Salvá hizo lo propio al contener tres disparos centralizados. El segundo tiempo tuvo el mismo ritmo con un ida y vuelta donde el que convertía el gol ganaba el partido.
La primera clara del complemento fue del visitante en los pies de Juan Cruz Esquivel, quien mano a mano disparó desviado a los 57’. A falta de 15’ para el final, Patronato tuvo otra oportunidad clara que terminó de la misma forma. Sin embargo, a los 81’ apareció Cristián González con un cabezazo certero para vencer a Mier, tras un córner de Nazareno Solís, y así concretar el triunfo.
Sobre el cierre Salvá se convirtió en héroe al despejar un disparo a quemarropa de Álvaro Angulo para mantener viva la ilusión del equipo entrerriano. De este modo, el conjunto de Paraná se mantiene en competencias internacionales con su clasificación histórica a la siguiente fase de la Copa Sudamericana.
Goleada y clasificación épica de San Lorenzo
El primer equipo argentino en abrir la sexta jornada de la Copa Sudamericana fue San Lorenzo, quien necesitaba una goleada para seguir en carrera. A pesar de que el “Ciclón” arrancó abajo en el marcador desde el vestuario y muy nervioso, se pudo imponer en un complejo cruce.
La primera emoción del partido fue a los 2’ de juego tras un mal despeje de Agustín Giay, quien le sirvió la pelota a Luis Arenas y éste logró vencer a Augusto Batalla. Una vez que el la visita se refugió tras el gol, el “Cuervo” dominó la pelota pero no era claro en los traspasos y de a poco los nervios lo desbordaban.
El local contó con diversas aproximaciones pero pecó en la eficacia para doblegar a Beycker Velásquez. Sin embargo, en tiempo adicional Devinson Martínez le comete penal al propio Giay y las ilusiones azulgranas florecieron otra vez. Tras un cambio de ejecutor por parte de Batalla, quien retiró a Federico Gattoni, Adam Bareiro marcó el gol de la igualdad.
Con el marcador en tablas, San Lorenzo se tranquilizó y pudo sobrellevar su propio nerviosismo. Al inicio del complemento, ambos equipos contaron con una ocasión en la que pusieron a trabajar a los arqueros. No obstante, a los 55’ Bareiro conectó de cabeza un córner de Malcom Braida y anotó su segundo gol de la noche.
Esa nueva conquista volcó todo a favor del local que a los 69’ llegó al tercero con un zapatazo de Braida, cuya dirección sorprendió al arquero rival. Sin bajar los brazos, el Ciclón buscó el gol que le faltaba para concretar el milagro y con ímpetu alcanzó su objetivo.
Tres minutos después, Nahuel Barrios emprendió una corrida individual que finalizó con un derechazo cruzado para vencer a Velásquez y decretar el 4-1 definitivo. Con la goleada culminada y tras saber que Palestino perdió ante Fortaleza, el juez Gery Vargas Carreño pitó el final para la remontada histórica y la clasificación épica en el Nuevo Gasómetro.
Tigre, ya clasificado, no pudo en Brasil
El conjunto de Victoria visitó al São Paulo con la clasificación en el bolsillo y solo podía aspirar al primer puesto del grupo si goleaba al equipo brasileño. Sin embargo, una expulsión temprana complicó los papeles del “Matador” y al final perdió 2-0 en Brasil.
El partido, que contó el arbitraje del ecuatoriano Guillermo Guerrero Alcívar, tuvo tintes especiales por la recordada final inconclusa de la misma competencia en el 2012. El primer período dejó en vista la forma de juego del conjunto paulista con pelotazos largos y apuestas a ganar en velocidad.
El primer intento finalizó en gol pero una clara posición adelantada anuló dicha conquista. A los 23’ llegó la tarjeta roja para Brian Leizza por un planchazo arriba del tobillo cuando no logró disputar una pelota a tiempo. Luego de la expulsión el partido no entregó ninguna emoción destacable y el marcador terminó en silencio en los primeros 45’.
En los primeros 5’ de la segunda mitad se dio la misma situación con una llegada de São Paulo que finaliza en gol pero es anulado por una infracción previa. En este sentido, el vídeo arbitraje (VAR) da aviso al árbitro para que visualice la jugada en cuestión por una posible mano que desvió la pelota. Tras la revisión correspondiente, el juez de campo modificó su fallo y el 0-0 continuó.
No obstante, el complemento fue todo para los brasileños. A los 72’ Juan conectó un centro que se desvió en un defensor y descolocó al arquero Gonzalo Marinelli. Luego de la apertura del resultado Sao Paulo manejó los tiempos del cotejo, mientras que Tigre tiró toda la carne a la cancha en busca del empate.
Con la visita jugada en ataque llegó el segundo a los 92’ con una volea cruzada, y en soledad, de Wellington Rato. Tigre sabía que era una parada brava pero estaba tranquilo porque tenía una vida más en la copa.