El último jueves, el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) N° 3 de Quilmes sobreseyó al jubilado de 73 años que en 2020 disparó y mató a un delincuente que había ingresado a su hogar de la ciudad bonaerense.
Cuando todo se encaminaba a un juicio por jurados que tenía como fecha prevista del 12 al 15 de este mes, la Justicia falló a favor del sobreseimiento de Jorge Ríos, tal como había solicitado el fiscal Andrés Federico Nieva Woodgate de la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio (UFIJ) 18 de Quilmes.
De este modo, se concluyó que el jubilado actuó en legítima defensa ante el delincuente Franco “Piolo” Moreyra de 26 años. Caso contrario, Ríos hubiese enfrentado la carátula de “homicidio agravado por el uso de arma de fuego”.
La certeza llegó tras los resultados de un nuevo peritaje el cual no logró determinar que los disparos se hayan producido en la calle, algo de lo que se sospechó durante todo este tiempo.
Los hechos sucedieron entre las 4 y 4:50 de la madrugada del viernes 17 de julio de 2020, cuando cinco ladrones ingresaron por tercera vez en la misma noche para robar en la vivienda de Ríos.
El hombre fue golpeado y amenazado con un destornillador por los delincuentes dentro de su propia casa. No obstante, en un descuido de los asaltantes, Ríos logró tomar una pistola Bersa Thunder calibre 9 milímetros y los ahuyentó con varios disparos.
En las cámaras de seguridad de la zona se observa a Moreyra caer herido sin poder escapar ante la presencia del jubilado apuntándole con el arma. Esta imagen es la que generó dudas en torno al momento del disparo que terminó con la vida del ladrón.
Las conclusiones del fallo
El sobreseimiento se sustenta en el fallo de 23 páginas dictado por el juez Rubén Darío Hernández del TOC 3 de Quilmes, al que accedió Télam.
“No tengo ni la más mínima duda de que esos disparos fueron realizados en ejercicio de la legítima defensa, porque se produjeron en respuesta a una agresión ilegítima y en el interior de su casa”, indicó el magistrado.
Una de las cuestiones por las cuales se descartó la ejecución en plena calle fue que “la filmación no captó fogonazos correspondientes a ninguno de los tres supuestos disparos efectuados en la vía pública contra Moreyra”, según el fiscal.
De este modo, y situando los disparos en la vivienda, explicó que Ríos “no tenía otra manera de defenderse”, y que el medio utilizado resultó “racional” ya que no existía un medio “menos lesivo”.
El sobreseimiento llegó tras el cuarto peritaje, en el que actuó el Gabinete Multidisciplinario de la Superintendencia de Policía Científica de la Policía de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA).
Los tres informes anteriores llegaron a resultados similares, con el primero de ellos elaborado por la División de Pericias Técnicas de la Superintendencia de Comunicaciones de La Plata.
El segundo fue realizado por la Sección Fotografía Forense y Videofilmación de la Delegación Policía Científica de la misma ciudad. Por su parte, el tercero lo realizó la Sección Pericia de Video, dependiente de la División de Pericias Técnicas de la Superintendencia de Comunicaciones de la capital bonaerense.