Café, café negro, café con leche y medialunas, con tostadas, las combinaciones del clásico desayuno argentino son infinitas. También como merienda o después de comer, esta infusión aterciopelada está hecha para disfrutar en cualquier ratito de la vida. Todos los primero de octubre se celebra el Día Internacional del Café, pero ¿por qué?, Nota al Pie te lo cuenta.
S.O.S productores
Desde hace ocho años, la ICO (Organización Internacional del Café, por sus siglas en inglés) decidió instaurar este día para visibilizar la cadena productiva que entra en acción para que el café llegue a manos del público. Lo cierto es que ser una de las bebidas más consumidas en el mundo también acarrea cientos de problemáticas para sus productores.
El reclamo está centrado en que, en los últimos años, el rendimiento de los cultivos de café se ha incrementado. Esto llevó a un excedente de producción que ha disminuido el valor del producto en el mundo. De esta forma, aunque el precio es elevado por el contexto inflacionario del país; lo que un productor gana es una mínima parte por cada taza. Además, esa ganancia no le permite invertir nuevamente en mano de obra, fertilizante, tierra, equipos, entre otros.
Esto, como no podía ser de otra manera, se vio profundizado luego de la pandemia. Sin importar que todos los días en el mundo se consumen aproximadamente 3 mil millones de tazas de café; las condiciones de cosecha siguen siendo desfavorables para sus productores.
El Día Internacional del café es una efeméride relativamente nueva. Promovida por la Organización Internacional del Café, todos los años la efemérides propone una consigna específica para enfocar las acciones.
La consigna del 2021 fue “La próxima generación”. Esta hace referencia a la necesidad de reconstrucción de distintos sectores de la industria, algunos más afectados que otros. Parece ser también un intento por vislumbrar un futuro más prometedor en un escenario que ahora se ve un poco más estable, pero que a su vez mantiene un equilibrio delicado.
Pasos para preparar un buen café
Según la Cámara Argentina de Café, en nuestro país se consume 1 kg de café por habitante al año. Aquí, no interesa si Argentina es por derecho natural un país matero, su consumo de este brebaje milenario es una cifra demasiado alta. Junto con los países nórdicos, nuestro país es uno de los mayores consumidores del mundo.
Les expertos del café advierten que el secreto está en las cantidades y recomiendan el uso de la prensa francesa o la cafetera volturno. Lo ideal es utilizar un gramo de café por cada 16 gramos de agua. Por ejemplo, la cantidad ideal de café a utilizar para el método de prensa francesa es de 21 g por cada 300 ml (1:14). En tanto, para el Drip, 20 g por cada 300 ml (1:16).
La temperatura del agua es similar a la que se usa para el mate, entre 80 y 90 grados. Nunca hay que usar agua hirviendo. Por último, hay que prestar atención a la molienda que se utiliza para el café. Para la prensa francesa, debe ser gruesa porque el café tiene mucho contacto con el agua caliente; y una molienda fina daría una infusión demasiado fuerte. Para filtros de papel, Melita, V60 o Chemex se aconseja utilizar molinos intermedios. Por último, para la Volturno o la Aeropress conviene inclinarse por una molienda fina.
Entre otras curiosidades, el café es la bebida mayor comercializada junto con la Coca Cola. Y si hablamos de ser maestros en la materia, Brasil es el mayor productor de todo el mundo, su cosecha equivale al 30,16% de la materia prima mundial.