A fines de agosto comenzó la campaña oficial para las elecciones presidenciales de Brasil. Será el 2 de octubre cuando el pueblo vecino definirá quién ocupará el puesto que en la actualidad ocupa Jair Bolsonaro. En ese marco, el medio de comunicación Universa analizó cuáles son las propuestas para la población LGTBIQ+ de les principales candidates a presidente en Brasil.
Al contrario de lo que podría pasar en Argentina, este no es un tema clave en las elecciones brasileñas. Sin embargo, no deja de ser importante, ya que afecta a millones de personas en el país más grande de América del Sur. Por eso, Universa analizó los planes de gobierno para ver cuántas veces se nombran las propuestas de género para las diversidades.
Los resultados fueron escasos. “Son planes gubernamentales superficiales; que todavía ponen en un segundo plano las necesidades de las personas LGBTQIA+. En la práctica, los candidatos entienden que necesitan hablar del tema; pero no se comprometen con esas agendas”, dijo la abogada Luanda Pires, especialista en relaciones gubernamentales, derecho antidiscriminatorio y diversidad.
¿Palabras vacías?
Las cuatro personas con más posibilidades de ganar las elecciones son Lula Da Silva, Ciro Gomes, Simone Tebet y Jair Bolsonaro. En sus planes de gobierno, sobre las personas del colectivo LGTBIQ+, las nombran: dos veces en el caso de Lula; una en las plataformas de Ciro y Simone; y ninguna vez en las propuestas del actual presidente.
El expresidente y líder en encuestas de intención de voto, Lula Da Silva, habla sobre su derecho a la salud y a la educación; y la lucha contra la homofobia y la transfobia. Lula representa al Partido de los Trabajadores, alineado con un pensamiento de izquierda.
En el polo opuesto está Jair Bolsonaro, quien va por la reelección. El integrante del Partido Liberal está segundo en las encuestas, y repudia públicamente todas las cuestiones de género.
Insiste en su defensa de los de “valores de la familia”; y en su rechazo al aborto y la “ideología de género”. Trata de reforzar el apoyo que recibe de evangéliques, repitiendo que “el Estado es laico; pero el presidente es cristiano”. De esta forma utiliza sus discursos de odio para generar apoyo en sectores del país que se identifican con un pensamiento retrógrado.
En Universa destacaron que durante su mandato se desmanteló el Consejo Nacional de Lucha contra la Discriminación LGBT+. También que el Ministerio de la Mujer, Familia y Derechos Humanos no gastó en políticas públicas para garantizar la protección o ampliar los derechos de la población LGBTQIA+.
Gracias a sus declaraciones, solamente 26% de las mujeres, acorde a los sondeos, le darán su voto. Más de la mitad (53%) del electorado brasileño es femenino.
Quienes pisan los talones de la dupla que se disputa la presidencia de Brasil son Ciro Gomes y Simone Tebet. El primero forma parte del Partido Democrático Laborista. En una entrevista en el programa “Pânico” de Joven Pan en mayo de este año, afirmó que no tiene “paciencia” para tratar temas como el lenguaje neutro (o no binario); porque para él esto “divide” a la población.
Sin embargo, en su propuesta gubernamental propone la creación del Comité Nacional de Políticas Públicas LGBTI+ con representantes estatales; y la creación de la Secretaría Nacional de Políticas Públicas para la Ciudadanía de la población LGBTI+.
Por su parte, Simone Tebet plantea garantizar la igualdad de oportunidades para mujeres, jóvenes, adultos mayores, personas con discapacidad, negros, quilombolas, población LGBTQI+, pueblos indígenas y otras minorías; en todos los niveles de decisión de la vida política, económica y pública.
Presidente en Brasil: poca representación de mujeres y disidencias
Una problemática que se repite en las elecciones, no solo de Brasil, es la poca paridad de género en les candidates a los puestos. En este caso, de ganar Lula Da Silva o Jair Bolsonaro, a ambos los acompañaría un vicepresidente.
De las 11 postulaciones para los comicios de octubre, solo dos duplas las componen mujeres para la presidencia y vicepresidencia. Se trata de Simone Tebet y Mara Gabrilli (Movimiento Democrático Brasileño); y de Vera Lucia Salgado y Raquel Tremembé (Partido Socialista de los Trabajadores Unificado).
Y aunque la presencia de mujeres en el poder no asegura que se cumplan las políticas de género, tampoco hay muchas posibilidades de que esas duplas lleguen a la cúpula del poder ejecutivo brasileño.
Por otra parte, hay una cifra esperanzadora. Cerca de 30 personas trans fueron electas en las elecciones municipales de 2020; en comparación con apenas 8 en 2016. Pero varias sufrieron amenazas después de asumir sus cargos en 2021; incluida una concejala de Río de Janeiro que tuvo que abandonar el país temporalmente.