La Masacre de Monte Grande fue un fusilamiento en la Avenida Boulevard Buenos Aires cometido durante la última dictadura cívico militar. El pasado 24 de mayo se cumplieron 45 años del hecho y, aunque la causa judicial que investigaba sobre lo ocurrido estaba en pausa, esta semana se reactivó.
Durante los últimos días de abril, se pudo ver un cartel de venta sobre el lote ubicado en la ex avenida Uriburu al 1151. Esto hizo que la causa salga de los cajones y sea revisada otra vez. La oferta fue publicada en dos grandes inmobiliarias de la zona y hasta en Mercado Libre por 350 millones de dólares.
Organismos de Derechos Humanos y familiares de desaparecides y asesinades pidieron que se preserve la memoria. La casa donde 16 personas fueron fusiladas el 24 de mayo de 1977 nunca fue declarada Sitio de Memoria, y actualmente hay tres edificaciones (entre ellas, la original) que están habitadas.
A raíz de esto se reactivó la causa que investiga la propiedad, gracias a la lucha del colectivo por la memoria. Interviene el Juzgado Federal N° 3, a cargo del juez Daniel Rafecas, y forma parte del juicio por los crímenes del Centro de Detención “El Vesubio”.
Qué ocurrió en Monte Grande
Entre febrero y mayo de 1977, once hombres y cinco mujeres fueron secuestrades. El 24 de mayo de ese año les fusilaron en un simulacro de enfrentamiento en la casa de la calle Boulevard Buenos Aires (ex Uriburu) 1151; en el límite de las localidades de Monte Grande y Luis Guillón, partido de Esteban Echeverría.
Las víctimas fueron: Luis Gemetro; Luis Fabbri; Catalina Oviedo; Daniel Ciuffo; Luis De Cristófaro; María Cristina, Julián Bernat; Claudio Giombini; Elisabeth Käsemann; Rodolfo Goldín; Mario Sgroi; Esteban Andreani; Miguel Harasymiw; Nelo Gasparini y dos mujeres que no fueron identificadas.
Les secuestrades eran militantes de la Organización Comunista Polo Obrero (OCPO), el Partido de los Trabajadores Revolucionarios (PRT), Montoneros, y el Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP). La mayoría eran empleades de fábricas y/o empresas; también había un médico, un veterinario, una trabajadora social y un albañil. Además, se encontraba una ciudadana alemana, Elisabeth Käsemann; dos hermanos, Julián y Cristina Bernat; y dos matrimonios: el de Cristina y Luis Cristófaro, y el de Catalina Oviedo y Daniel Ciuffo.
El operativo lo llevó a cabo Carlos Suarez Mason del Primer Cuerpo del Ejército y se cree que el lugar fue elegido estratégicamente. El inmueble tenía accesibilidad desde el Centro Clandestino de Detención Tortura y Exterminio (CCDTyE) “El Vesubio”, en Autopista Ricchieri y Ruta 4, frente al destacamento donde funcionaba el CCDTyE de “Puente 12”, partido de La Matanza.
El Gobierno militar difundió lo ocurrido la madrugada del 24 como un “abatimiento de 16 sediciosos sorprendidos en una reunión clandestina”. Durante la mañana de ese mismo día, los cuerpos fueron ingresados al Cementerio Municipal como “NN” por les bomberes locales.
Memoria por la Masacre
Recién en 2017 fueron colocadas las primeras baldosas con los nombres de las víctimas. Y, tras varios años de reclamos, en marzo de 2022 el Cementerio Municipal fue declarado Sitio de Memoria por la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación (SDH).
Gracias a ello, se llevó a cabo un relevamiento de toda la información de la SDH sobre lo ocurrido. Es por ello que el pasado 24 de marzo el chalet donde fueron cometidos los delitos de lesa humanidad se declaró de “utilidad pública y potencial expropiación” por el intendente del Municipio de Esteban Echeverría, Fernando Gray. Esto quiere decir que no podrá ser vendido.
Por su parte, la Comisión Vesubio y Puente 12 trabajan para que el lugar sea dedicado a un Espacio para la Memoria. Es por ello que se retiraron los carteles de venta y la publicación en la web. Esto se suma a que se reactivó la causa que investiga la propiedad: interviene el juzgado Federal N° 3, a cargo del juez Daniel Rafecas, y forma parte del juicio por los crímenes del Centro de Detención “El Vesubio”.