“¿Qué es ser mujer y qué es ser varón?” es una de las preguntas que atraviesa el debate sobre la identidad de género. Desde muy joven, Lohana Berkins participó de forma activa para instalar este debate como paso principal para exigir una mejor calidad de vida para las personas con identidades disidentes. En el sexto aniversario de su fallecimiento, la comunidad aún la recuerda con cariño y orgullo.
Como una forma de homenaje, el viernes cuatro de febrero en la Plazoleta IV Siglos de la provincia de Salta, donde Lohana nació, se realizó una jornada de información sobre la Ley de Identidad de Género. Por otro lado, en La casa de Lohana y Diana, en Laferrere (Provincia de Buenos Aires), la conmemoraron con un videodebate, lectura de textos y poesía.
“Por más que tenga el documento de identidad, voy a seguir diciendo: Soy Lohana Berkins, travesti; no Lohana Berkins, mujer, porque la pregunta retórica que nos haríamos es justamente qué es ser mujer”, afirmaba Lohana Berkins sobre su identidad de género.
Actualmente, movimientos que luchan por el derecho a la diversidad sexual, la igualdad de género y los derechos humanos en general, recuerdan a Lohana Berkins como una activista que luchó hasta su último día de vida. Una lucha en nombre de una comunidad socialmente excluida y relegada.
¿Quién fue Lohana Berkins?
Nacida en Salta en 1965, desde muy joven fue consciente de sentir una disidencia con el género que le fue asignado. A la edad de trece años, este sentimiento le causó conflictos con su familia, hasta que su padre le dijo: “O te hacés bien hombre o te vas”. Entonces se fue de su casa y, más tarde, se instaló en Buenos Aires.
La necesidad de luchar para defender su identidad se manifestó cuando quiso inscribirse en la Escuela Normal N.º 3 para ser maestra, pero no le permitieron hacerlo con su nombre elegido. Debido a esto, se dirigió a la Defensoría del Pueblo para radicar una denuncia.
Posteriormente se convirtió en la primera persona trans en conseguir un empleo público como asesora legislativa en temas de género, derechos humanos y derechos de les niñes. También fue la primera persona trans en postularse para diputada nacional.
Sin embargo, Lohana no solo buscaba el respeto a su propia identidad, sino que también formaba parte de una comunidad que se organizó para reclamar los derechos de todas las personas. Uno de sus logros destacables fue la fundación de la primera escuela y cooperativa de trabajo para personas travesti-trans de Latinoamérica.
Un legado muy importante que Lohana dejó a la sociedad antes de partir, fue la militancia de la Ley de Identidad de Género. Esta reconoce legalmente a las disidencias de género y busca evitar la discriminación en todos los ámbitos públicos.
Mensajes en su memoria
La Liga de los Derechos Humanos expresó: “A seis años de su fallecimiento, recordamos a Lohana Berkins: abolicionista, comunista, salteña, travesti. Murió por enfermedades ligadas a la salud, que también es un privilegio. No la vamos a olvidar’’.
Por su parte, desde la Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional (CORREPI) declararon: “Se cumplen seis años de la muerte de Lohana Berkins. Una referencia de lucha y organización, no sólo para el movimiento travesti-trans, sino para todxs lxs que queremos construir una sociedad distinta: sin discriminación, sin opresión y sin represión’’.
“Hay que tener coraje para ser mariposa en un mundo de gusanos capitalistas” fue una de las frases de Lohana que logró calar en el movimiento feminista y LGTBIQ+ (lesbianas, gays, transgéneros y transexuales, bisexuales, intersexuales, queer, y demás identidades y orientaciones). Traerla a nuestra memoria, nos recuerda una vez más que luchar sirve. ¡Hasta siempre compañera!’’, finalizaron desde la CORREPI.