Neil Young le dio esta semana un ultimátum a Spotify: “Pueden tener a Rogan o Young. No ambos”. El músico criticó al servicio de streaming por el alojamiento del podcast The Joe Rogan Experience en una carta publicada en línea, en la que pedía que se eliminara su música del servicio de transmisión. Spotify eligió a Joe Rogan, y eliminó todo el catálogo del cantante.
Las objeciones de Young se basaron en lo que vio como «información errónea sobre el Covid-19 que amenaza la vida» impulsada por Rogan. Este reclamo fue respaldado en una carta enviada al servicio de transmisión a principios de este mes, firmada por 270 profesionales médicos y científicos quienes pidieron a Spotify que dejara de difundir el punto de vista infundado de Rogan.
Young tuvo el coraje de sus convicciones y el respaldo de su sello Reprise Records parte de Warner Music Group, porque, como dijo en un comunicado en su sitio web, eliminar su música de la plataforma significa «perder el 60% de mis ingresos de transmisión en todo el mundo en nombre de la verdad”.
La cantautora canadiense Joni Mitchell y el músico británico James Blunt anunciaron que seguirán los pasos de Neil Young, sumándose a la protesta contra Spotify por mantener en el catálogo el popular podcast que difunde teorías falsas sobre la pandemia y las vacunas.
¿Quién es Joe Rogan, el podcaster antivacunas?
Hace unos 20 años, Joe Rogan era el presentador del programa Fear Factor en NBC, en el que los concursantes enfrentaron acrobacias peligrosas, aterradoras o asquerosas. Ahora, es una de las figuras más poderosas de los medios estadounidenses. El comediante de 54 años lanzó el podcast The Joe Rogan Experience en 2009.
Aunque a veces simpatiza con la izquierda, dice que detesta las políticas de género y la corrección política. El podcaster es conocido por sus declaraciones misóginas y transfobicas. Así, su contenido intercala comedia, política, críticas a los medios, entrevistas y discursos sobre temas que van desde las peleas en jaulas hasta la mecánica cuántica.
A principios de este mes, Rogan invitó al programa al Dr. Robert Malone, al que se atribuye un papel en el desarrollo de la tecnología de vacunas de ARNm. Malone, a quien se le prohibió el acceso a Twitter por difundir información errónea sobre coronavirus, afirmó que “los mandatos de una vacuna experimental son explícitamente ilegales” y dijo que el gobierno de USA estaba “fuera de control”.
Ambos fueron criticados por promover varias teorías de conspiración sin fundamento, incluida la afirmación de que los hospitales obtienen incentivos financieros para dar diagnósticos falsos para incrementar el número de muertes por Covid-19.
Rogan promueve el uso de la ivermectina, un fármaco antiparasitario que no tiene ningún beneficio comprobado contra el Covid-19. Además, el cómico dice que no es antivacunas, aunque ha cuestionado la necesidad de dársela a gente joven y sana.
En los últimos meses, Rogan ha recibido a invitados antivacunas, incluida la congresista republicana de extrema derecha Marjorie Taylor Greene y el mariscal de campo de los Green Bay Packers, Aaron Rodgers, quienes describieron el medicamento antiparasitario ivermectina como un tratamiento viable para el Covid-19.
La posición de Spotify
La decisión de Spotify de dejar ir a Neil Young planta a la plataforma en un nuevo frente de batalla. En el pasado, las peleas de la empresa con los artistas se centraban en cuestiones comerciales, pero este nuevo conflicto es de carácter ideológico.
Lo que se desarrolló es un enigma ético y financiero complejo para Daniel Ek, cofundador y director ejecutivo de Spotify. ¿Está contento de que Spotify amplifique la desinformación médica a través, entre otros, de su podcast estrella, un programa por el que pagó unos 100 millones de dólares?, ¿O hará que la compañía vigile y verifique lo que dicen sus podcasters?.
El escándalo de Rogan dice mucho sobre las nuevas prioridades de Spotify, que ya no es solo un servicio de transmisión de música, ahora se considera a sí mismo como una plataforma de audio y el podcasting es su nuevo eje.
Los podcast poseen una frecuencia de producción mayor que la de cualquier músico, lo que refuerza la lealtad del consumidor, y por lo tanto de las suscripciones. Esta fidelidad puede ser la razón por la que Spotify duda en dejar ir a Rogan, o incluso de intentar frenar algunas de sus opiniones más extremas. Sobre todo teniendo en cuenta que la plataforma lo contrató porque la controversia que genera atrae audiencias.
Para Spotify, era una elección obvia. Cuando se trata de planear un futuro lucrativo en los medios modernos, Young, una leyenda cultural, no era competitivo.
Joe Rogan se disculpa tras la polémica
El podcaster estadounidense ha decidido afrontar la polémica y pidió disculpas a través de un vídeo publicado en su programa.
En un clip de 10 minutos de duración, Rogan pide perdón a todos aquellos usuaries a los que ha molestado después de compartir información sobre las vacunas y el Covid-19 en varios de sus programas.
Destaca, además, que hará «todo lo posible para tratar de equilibrar los puntos de vista más controvertidos». No obstante, sugiere que mantendrá su mecánica, donde incluirá a invitados polémicos o que tengan opiniones contrarias.
Asimismo, Rogan alega que algunos de los episodios más polémicos de su programa de Spotify en los que trata temas sobre la efectividad de las vacunas o el uso de las mascarillas no deberían catalogarse como desinformación.
Spotify emitirá un aviso en aquellos podcast que hablen sobre Covid-19
Debido a las críticas de la comunidad científica, y en parte a la pérdida de 2.000 millones de dólares y a una baja del 12% del valor de sus acciones por la partida de Neil Young de la plataforma, Spotify lanzó una declaración acerca de cómo tratará en lo sucesivo este tipo de contenido.
“Me ha quedado claro que tenemos la obligación de hacer más para proporcionar equilibrio y acceso a información ampliamente aceptada de las comunidades médica y científica que nos guían a través de este tiempo sin precedentes”, aseguró Daniel Ek, director ejecutivo de la plataforma.
En tanto, manifestó que la empresa debe equilibrar la “expresión del creador” con “la seguridad de nuestros usuarios”. “Es importante para mí que no asumamos la posición de ser censores de contenido”.
Por último, a raíz de esta controversia, la plataforma implementará una serie de medidas que pretenden evitar la propagación de desinformación relacionada con la pandemia. Entre ellas, la inclusión de un aviso en aquellos podcast donde se hable sobre Covid-19.