Retiros (In)voluntarios está disponible con acceso gratuito en la plataforma Contar. Nota al Pie dialogó con la directora, Sandra Gugliotta, que ya tiene una obra que transita tanto la ficción como el documental. Sus películas se exhibieron en festivales como Cannes, Berlín y Locarno. Fue candidata al Goya y recibió diversos premios y nominaciones. Retiros (In)voluntarios es parte de un proceso de investigación que ya se transformó en un tríptico y que continuará.
La película se sumerge en el drama de les trabajadores de France Telecom que no pudieron resistir las presiones y los efectos de una restructuración feroz. Esto, en muchos casos, les empujó a la depresión y/o al suicidio. El documental se filmó entre Argentina y Francia, ya que es un caso que tuvo gran resonancia en la prensa y la sociedad francesa, y que llegó a los tribunales.
La directora busca, además, las consecuencias de las políticas de explotación en la Argentina neoliberal en les trabajadores de la empresa Entel. Reflexiona sobre el deterioro de la vida de los individuos y las sociedades a partir de la implementación de políticas salvajes de explotación y deshumanización.
Conversatorio sobre violencia laboral
El viernes 17 de diciembre, se realizó un conversatorio sobre violencia laboral. Este lo condujo el periodista y colaborador de Contar, Fito Mendoca Paz. En el evento virtual participó Sandra Wolanski, investigadora asistente del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), quien investigó sobre las luchas de los trabajadores telefónicos en la Argentina ante la privatización de los 90. También estuvo Damián Pierbattisti, investigador del CONICET (CITRA) y profesor titular de la carrera de Sociología.
Retiros (In)voluntarios se inspira en sus investigaciones sobre la privatización de ENTel y su sucedáneo en Francia. Frente al inminente estreno, la directora contó los detalles de la realización del filme.
¿Cómo surgió la idea de realizar este documental?
Hace mucho tiempo, vimos junto a un colega, Víctor Cruz, una noticia en un diario que parecía insólita sobre una cantidad de suicidios que habían sucedido en Francia en circunstancias casi escenográficas; en el interior de la empresa France Telecom. A partir de allí, fue como deshilvanar un ovillo. De cada hilo que se tiraba surgía un nuevo tema, más preguntas, muchas películas posibles y maneras de contarlas. Esa búsqueda de cómo contar esta película y la investigación en los dos países fue una aventura que me llevó mucho más lejos de lo que imaginé en ese momento.
El film toca temas muy vigentes, como las presiones laborales en las empresas, los despidos o «retiros voluntarios/involuntarios«
Llevo mucho tiempo con esta película y esta investigación. Al principio pensaba que era un tema «arqueológico», pero desgraciadamente la flexibilización laboral, los despidos, las transformación en el mundo del trabajo nunca dejaron de ser un tema candente.
¿Es necesario instaurar el debate de lo que implican las políticas neoliberales para la clase trabajadora, en la actualidad, donde algunos sectores quieren imponerlas como «salida»?
La película habla fundamentalmente sobre el sufrimiento de las personas y, particularmente, lo que le pasa a los cuerpos de las personas con esas políticas neoliberales. Sufrimiento, enfermedades, malestar… en algunos casos, suicidios . Algo que no muestran los números cuando se habla de «ajustes» y que, intencionalmente, se trata de evitar en las discusiones políticas y económicas. Mi película habla sobre la intimidad de las personas.
¿Cuál es tu reflexión a 20 años del 2001?
Creo que la reflexión está en la película. «Todo lo que parecía previsible se desvaneció. De los trabajos precarios a la desocupación, de las crisis políticas a la inflación, del saqueo de las corporaciones a la traición de los políticos. Todo fue en declive». Hoy me parece que no podemos seguir dando vueltas en círculos. Es urgente ir hacia adelante y solucionar de verdad algunos de nuestros conflictos.
En una parte del documental hablan de «genocidio telefónico». ¿Qué dimensión tuvo esta problemática en nuestro país?
Hubo 28 000 bajas sin producir un solo despido sin causa, como dice uno de mis protagonistas, el abogado laboral Luis Ramírez. Se perdieron 28 000 puestos de trabajo sin despedir a nadie y tratando de que ello pasara desapercibido. Cuando cambia la conducción del gremio y gana la lista opositora, las cosas empiezan a cambiar y se comienza a frenar esa política. Las privatizaciones fueron un capítulo importante dentro de la historia del menemismo.
¿Hay algo más que quieras destacar?
Que el documental está libremente inspirado en el libro La privatización de los cuerpos de Damián Pierbattisti.