Luego de los anuncios hechos por la Federación Argentina de la Industria del Pan y Afines (FAIPA), en las próximas semanas, el precio del pan subirá entre un 12% y un 15% en muchos lugares del país. Entre los incrementos producidos en provincias como Chaco, Mendoza, Córdoba y Entre Ríos, ahora se suma la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) y la posibilidad de que también suceda en la Provincia de Buenos Aires.
Sin embargo, en conversación con Nota al Pie, el titular del Centro de Panaderos de Avellaneda “27 de abril”, Gaston Mora, adelantó que muchas provincias todavía no han adherido a los aumentos propuestos. Esto se debe a que están “a punto de tener una reunión con el Secretario de Comercio, Roberto Feletti, en la cual está bastante avanzado el desdoblamiento de precios entre lo internacional y el mercado interno”.
Según el dirigente panadero, de concretarse esta posibilidad, el aumento estaría injustificado porque las tarifas dolarizadas pasarían a tener un precio a nivel local. “Más de ocho provincias, entre las que se encuentran muchas cámaras de la industria panadera de la Provincia de Buenos Aires, están acompañando nuestra postura y esperando la reunión de la semana próxima”, indicó Mora.
La posibilidad de evitar o retrotraer los incrementos
El kilogramo de pan, en muchas panaderías del país, se encuentra a un precio que varía entre los $180 y $200. Ese fue el valor sugerido por un sector de la industria panadera y es una realidad que también puede llegar a otras provincias. Con la difícil situación socio-económica que atraviesa un sector importante de la población argentina, la posibilidad de un acuerdo con la Secretaría de Comercio genera especial interés.
En este marco, Gaston Mora explicó que de producirse un acuerdo en la reunión con Feletti existe la posibilidad de mantener el costo del pan en los lugares donde todavía no ha aumentado; como así también retrotraer su valor en donde si lo ha hecho.
“Estamos trabajando en un subsidio al trigo y a la harina para que, en las panaderías que accedan a él, se vea reflejado un precio diferenciado en los mostradores”, desarrolló el dirigente.
Por otro lado, Mora indicó que “en los próximos días estaremos anunciando, junto al Ministerio de Desarrollo Social, el lanzamiento de un pan dulce social cuyo valor oscila entre $100 y $150 entendiendo que a ningún argentino le puede faltar ese alimento en sus mesas esta navidad”.
La situación de la industria panaderil
Diversos representantes de las cámaras de la industria panaderil indicaron que los aumentos sugeridos obedecen no sólo al incremento del costo de las materias primas sino también a una “elevada” carga tributaria que, a su vez, va a acompañada de un alto gasto en contribuciones y aportes para quienes trabajan en las panaderías.
El titular del Centro de Panaderos de Avellaneda “27 de abril” sostuvo que los aumentos son una lamentable realidad pero que, sin embargo, tienen relación con la actitud lucrativa de algunos grupos. “Sabemos que cuando empezó a dispararse el valor del dólar tuvimos un sector que especuló con ganar dinero ante un posible congelamiento de precios”, manifestó.
“La industria panaderil viene bastante golpeada no solo por los cuatro años del gobierno anterior sino también por una pandemia que profundizó los problemas y que, como consecuencia, dejó a muchas panaderías cerradas”, dijo Mora. Al mismo tiempo, a pesar de la difícil situación que atraviesa la industria, pidió mesura en relación a los incrementos.