
El próximo fin de semana se disputará la última fecha de la etapa regular en la Primera Nacional con varios aspectos a finiquitar. La gran obsesión de los equipos que juegan en esa categoría es alcanzar la elite del fútbol argentino y en poco tiempo se conocerán a los nuevos componentes para el 2026. Asimismo, esta temporada podría combinar diversos hechos históricos de cara a la conclusión final.
Por un lado, la definición por el primer ascenso ya contempla un finalista, mientras se espera su rival con 4 aspirantes para el prestigioso lugar. En tanto, el Reducido aún no cuenta con todos sus clasificados y puede darse algunas sorpresas inesperadas. Para cerrar, ya se confirmó a 3 de los 4 equipos que perderán la categoría, con uno cuya suerte repercutió en todo el país, y la última vacante tendrá 2 nombres que buscarán el milagro.
A medias
La modalidad de los torneos en el fútbol argentino ha sido un constante foco de discusión entre los hinchas en toda la Argentina, y la Primera Nacional no es la excepción. De hecho, la categoría en cuestión posee 36 equipos, cantidad que se alteró en las últimas ediciones entre los topes de 25 y 38, con dos zonas de 18 cada una. Bajo un sistema de ida y vuelta en sus respectivos grupos, los 2 mejores se enfrentarán entre sí para determinar el primer ascenso.
En ese sentido, la Zona A logró que su mejor integrante aparezca con una jornada de antelación, cuando Deportivo Madryn sumó 60 unidades, 5 más que Atlanta, su inmediato perseguidor. El Aurinegro venció 2-1 a Arsenal en la fecha anterior y aprovechó la igualdad 2-2 del Bohemio a domicilio de Gimnasia y Tiro de Salta. De ese modo, el cuadro patagónico está a un paso de jugar por primera vez en la máxima categoría del país en más de 100 años de historia.
Las últimas campañas de la Segunda División disfrutan de la presencia del equipo chubutense desde 2022, cuando debutó en la categoría. Desde entonces se volvió en la institución más representativa del sur argentino en 2024 tras el descenso al Federal A de Guillermo Brown, su clásico rival. Incluso, ese año estuvo en la pelea por el 2° ascenso pero quedó eliminado en cuartos y en 2025 sueña con la gloria como consecuencia de 16 triunfos, 12 empates y 5 caídas.
Por su parte, la Zona B tendrá una definición para el infarto con la calculadora en mano. El líder es Gimnasia de Mendoza con 60 puntos, seguido por Estudiantes de Buenos Aires (58) y Deportivo Morón (57) junto a Estudiantes de Río Cuarto (57). Lo cierto es que los cuyanos tienen todas las de ganar al depender de su resultado y anhelan con debutar en una liga de Primera División tras jugar los viejos Torneos Nacionales, al igual que sus adversarios.
A su vez, el Lobo tiene un pasado muy importante a nivel regional y provincial como Deportivo Madryn y en 2024 cayó en la definición por el 2° ascenso. Su próxima presentación será como local frente a Defensores de Belgrano durante la tarde del domingo. Mientras que, los de Caseros irán contra Mitre de Santiago del Estero, el Gallo ante Chaco For Ever y los cordobeses con Central Norte de Salta, todos como visitantes y en el mismo turno.
La apuesta final
Otro punto a tener en cuenta al momento de analizar la finalización de la etapa regular es determinar los equipos clasificados al Reducido. Más allá de la final entre los líderes de cada zona, aquellos que culminen entre la 2° y 8° posición se enfrentarán en una fase con formato de Play-off hasta que quede un vencedor. Asimismo, el que triunfe en dicha fase se acreditará el pasaje restante a la Primera División del próximo año.
Para este pequeño certamen los cruces establecerán a los 2° contra los 8°, los 3° ante los 7°, los 4° frente los 6° y los que queden en 5° lugar entre sí. La primera instancia será a partido único en la cancha del mejor posicionado, quien también poseerá ventaja deportiva para avanzar en caso de empate. De esta manera, el perdedor del cotejo decisivo por el 1° ascenso se sumará a los 7 ganadores para disputar la segunda ronda.
En esta nueva fase se utilizará el formato de ida y vuelta con los duelos definitorios en la casa del equipo mejor ubicado en la tabla general, que mantendrá la ventaja deportiva. Para las semifinales se conservará el mismo criterio y solo en la final se suma la posibilidad del tiempo extra junto a los penales si la paridad persiste. Cabe destacar que en ambas zonas solo resta un cupo por cubrir, aunque en la A la pelea es de 2 equipos y en la B es de 3.
El primer grupo tiene asegurado a Atlanta con 55 unidades, Tristán Suárez (49), San Miguel (49), Gimnasia y Tiro (48), Patronato (48) y San Martín de Tucumán (48). En tanto, Deportivo Maipú cierra las posiciones clasificatorias con 45, a una unidad de Colegiales que dará pelea hasta el final. El desenlace será en el turno vespertino del sábado cuando el Botellero visite al escolta de la zona y los de Munro hagan lo propio en su casa ante el puntero.
A la espera de su finalista, el segundo grupo tendrá con seguridad a Gimnasia de Jujuy con 54 puntos, Chaco For Ever (52), Temperley (52) y Agropecuario (51). No obstante, Chacarita suma 49 y Defensores de Belgrano 48 para no perder las esperanzas matemáticas de un posible ingreso. En ese contexto, el Albinegro irá con Deportivo Morón, el Gasolero con Nueva Chicago, el Sojero con San Telmo, el Funebrero con el Lobo jujeño y el Dragón con el mendocino.
La última vacante
Pese a que los puestos de arriba poseen mayor margen con diversos nombres en competición, la zona de abajo también tiene una pequeña disputa de cara a la próxima temporada. En la Zona A se conoció durante la jornada pasada el descenso de Arsenal a la Primera B Metropolitana luego de 33 años. Los de Sarandí cayeron con Deportivo Madryn y sentenciaron la crónica de una muerta anunciada respecto a lo deportivo.
Lejos quedó el poderío político que ostentaba el equipo del Viaducto cuando Julio Grondona era el presidente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA). En ese sentido, se despidió de Primera en 2023, en 2024 evitó el descenso a la tercera división pero esta temporada no tuvo tanta suerte. Sin un rumbo futbolístico ni institucional, no logró evitar el declive como consecuencia de 16 derrotas, 10 empates y 7 victorias en el año, con solo una en la primera ronda.
Asimismo, tuvo su época de gloria no muy atrás en el tiempo cuando conquistó la Copa Sudamericana en 2007, el Clausura y la Supercopa Argentina de 2012 y la Copa Argentina de 2013. La realidad es que el ascenso se ha vuelto más parejo y muy difícil para los clubes de mayor experiencia, situación que también sufrieron Quilmes, All Boys y Ferro este año. El peso del escudo y la camiseta ya no es suficiente para ganar en el fútbol argentino.
La cuestión a resolver es quien será el equipo que comparta el mismo destino que el Arse a falta de un solo partido. Incluso, en la fecha en que se confirmó su despedida, también se estableció la salvación para el Cervecero, el Albo y el Verde. Frente a ese panorama, Almagro con 35 unidades y Alvarado con 33 son los únicos que pelean mano a mano para no descender. El sábado por la tarde el Tricolor recibirá a Güemes y los de Mar de Plata jugarán en Sarandí.
En cuanto a la Zona B, ya todo está definido desde hace un par de fechas cuando se consumieron los descensos de Talleres de Remedio de Escalas con 23 puntos y de Defensores Unidos con 21. Por encima de los colistas quedó Colón con 29 que no logró su objetivo de pelar por el ascenso. De hecho, el Sabalero no se adaptó aún al torneo y fue otro que sufrió mucho este año al punto de coquetear con la idea de perder la categoría en algún momento.