
La barbarie, dijo Gustavo Petro, atraviesa al planeta bajo distintas formas de violencia. En su discurso ante Naciones Unidas, el mandatario colombiano vinculó la ofensiva militar de Israel en la Franja de Gaza con los recientes ataques aéreos en el Caribe ordenados por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
“Gaza es una demostración de lo que quieren hacer en toda América, en todo el mundo, en toda África, en todo el mundo árabe. Es una demostración del poder de la barbarie”, subrayó Petro en un foro sobre financiación climática.
Jóvenes asesinados en el Caribe
El presidente colombiano repudió que las acciones militares de Washington afecten a poblaciones pobres, en particular jóvenes que viajan en lanchas rápidas en el Caribe.
“Están asesinando jóvenes con misiles, ordenado por un presidente que es el de los EE.UU.”, denunció. Según el mandatario, más de 15 jóvenes han sido víctimas de esos ataques, en un contexto donde la Administración Trump sostiene —sin pruebas— que esas embarcaciones trasladaban drogas hacia territorio estadounidense.
La descertificación de Colombia
Petro también fustigó la decisión de Estados Unidos de descertificar a Colombia como país cooperador en la lucha contra el narcotráfico, algo que no ocurría en tres décadas.
“No es solo la descertificación personal del presidente Petro, es el asesinato de ya más de 15 jóvenes, precedido por el encarcelamiento de miles y miles de jóvenes caribeños (…) en las cárceles de aquí al lado, en Nueva York”, sostuvo.
El mandatario reiteró que la llamada “guerra contra las drogas” castiga a los pueblos pobres del sur, mientras los países ricos consumidores quedan al margen.
Barbarie, migración y crisis climática
En su discurso, Petro conectó la política antidrogas con la ofensiva militar en Gaza, el trato a los migrantes y la crisis climática:
- “Los misiles caen sobre la pobreza, no sobre donde está el lujo”.
- “Nunca fue una guerra contra los narcotraficantes, sino política dominante de poder mundial, del norte sobre el sur”.
- “La política de drogas está ligada al genocidio en Gaza, a la nueva política de migración y al fracaso actual de la crisis climática”.
Para el mandatario colombiano, detrás de estas políticas opera una visión que aún considera a “una raza superior”, lo que se refleja en las deportaciones y en el desprecio hacia los pueblos del sur global.

