
En los últimos meses, distintos barrios de la Ciudad de Buenos Aires registraron incidentes de envenenamiento de animales, generando preocupación entre dueñes y vecines. La exposición a sustancias tóxicas puede ocurrir en parques, veredas o dentro de viviendas, por restos de alimentos o productos peligrosos.
Para prevenir riesgos, especialistas aconsejan no permitir que las mascotas coman restos de comida de la vía pública, supervisarlas durante paseos y conocer qué plantas o productos químicos pueden resultar peligrosos. Mantener estas precauciones reduce significativamente la probabilidad de intoxicación.
Ante síntomas como vómitos, convulsiones, salivación excesiva o cambios de comportamiento, se recomienda llevar al animal de inmediato a un veterinario. Guardar muestras de la sustancia ingerida puede facilitar el diagnóstico y, en casos sospechosos, ayudar en investigaciones.
En respuesta a denuncias recientes, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires llevó a cabo operativos de limpieza y sanitización en puntos estratégicos de Palermo y Las Cañitas, buscando eliminar posibles fuentes de toxicidad y reducir la exposición de los animales a sustancias peligrosas.
Además, las autoridades locales pusieron a disposición de la Justicia las imágenes de cámaras de seguridad de la zona para colaborar en la investigación de los hechos, fortaleciendo la coordinación en la protección de los animales y la seguridad vecinal.
Les vecines pueden reportar incidentes y recibir orientación mediante los canales oficiales de la Ciudad, como WhatsApp de la Ciudad, la aplicación miBA o el 147. Registrar y denunciar casos de envenenamiento permite alertar a la comunidad y tomar medidas preventivas para evitar nuevos incidentes.
Proteger a las mascotas frente a los envenenamientos requiere conciencia, vigilancia y colaboración comunitaria. Con precauciones simples, uso de los canales oficiales y atención inmediata ante emergencias, es posible minimizar riesgos y garantizar el bienestar de los animales en la ciudad.