
En un contexto de fuerte ajuste presupuestario, campañas de desprestigio hacia la universidad pública y el sistema científico nacional por parte del gobierno de Javier Milei, la defensa de la ciencia y la educación superior adquiere un carácter urgente. Frente a la amenaza que implica el recorte de recursos a la investigación, el vaciamiento de organismos clave y el intento de desacreditar el valor social del conocimiento, distintas instituciones académicas y culturales vienen articulando acciones para visibilizar la importancia de sostener una universidad pública, gratuita y de calidad, así como el desarrollo científico y tecnológico como pilares fundamentales para el futuro del país.
Una de estas iniciativas fue la Semana en Defensa de la Ciencia y la Universidad Pública, organizada por la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la Universidad de Buenos Aires (UBA) junto a la Biblioteca Popular Cornelio Saavedra. La propuesta se desarrolló del 11 al 18 de julio, con muestras de diseño, una feria itinerante de ciencias y charlas-debate con investigadores y profesores.
La semana de actividades comenzó el viernes 11 de julio con la inauguración oficial de la muestra #DefendemosLaCiencia, una exposición de diseños realizados por estudiantes de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo de la UBA. La apertura, que contó con la presencia de autoridades universitarias, docentes e investigadores, incluyó una recorrida guiada por la muestra y una charla a cargo del Dr. Diego Winocur titulada “¿Dónde estabas en la tormenta del 2 de abril de 2013?”.
El sábado 12, la Biblioteca se convirtió en escenario de la feria Ciencia y Universidad en el Barrio, una propuesta interactiva impulsada por el equipo de divulgación de Exactas UBA. Durante la jornada, vecinos y vecinas pudieron acercarse a experimentar actividades como “¿Cómo sabemos de qué está hecha una estrella?” o “Los puentes de Koningseberf”, así como recibir información sobre carreras universitarias. Ese mismo día, la Dra. Lucía Pedraza brindó un conversatorio titulado “¿Qué tienen en común las bandadas de aves, el cerebro y la sociedad?”.
El lunes 14, el Dr. Daniel Grimaldi, quien presentó “Las mil caras de la inteligencia artificial” dentro del ciclo Esparciencia, una invitación a reflexionar sobre los desafíos y potencialidades de esta tecnología en constante expansión.
El martes 15, el Dr. Alberto Kornblitt encabezó un encuentro bajo el título “Significación de la defensa de la investigación científica y la universidad pública”, en el que se discutió el valor estratégico de la ciencia y la educación superior como herramientas de soberanía y desarrollo nacional.
Ya el jueves 17, el Dr. Andrés Kreiner, secretario bonaerense de la Asociación de Profesionales de CNEA y la Actividad Nuclear (APCNEAN), ofreció una charla sobre “Situación de la investigación y aplicación en Argentina de la energía nuclear”.
La semana cerró el viernes 18 con una nueva recorrida por la muestra y un conversatorio final a cargo del Prof. Martín Williman y Florencia Fiorotto, titulado “Del privilegio al derecho: Las bibliotecas y el acceso democrático al conocimiento científico”, en el que se reafirmó el rol de las bibliotecas como espacios de inclusión, formación y circulación del saber en contextos de creciente desigualdad.
Por su parte, el decano de la Facultad de Ciencias Exactas, Guillermo Durán, destacó la importancia de la continuidad del acercamiento logrado con el barrio de Saavedra y sus entidades vecinales a partir del estudio que se lleva adelante en los últimos dos años para determinar los riesgos de inundaciones de la cuenca del arroyo Medrano que atraviesa el Barrio.
Las jornadas dejaron en claro que la ciencia, la educación y la cultura no son privilegios ni gastos prescindibles, sino derechos que sostienen el desarrollo de una sociedad más justa y democrática. En un momento en que el conocimiento es atacado y los recursos para su producción son recortados, este tipo de encuentros se vuelve indispensable para visibilizar, para crear lazos con la comunidad y para defender la universidad pública, el pensamiento crítico y el acceso al saber como bienes colectivos irrenunciables.