Esta tarde en Avellaneda, el gobierno nacional entregó las viviendas del edificio Sagol a las fuerzas federales pese a que el mismo había sido adjudicado a beneficiarios del Plan Procrear.
Estuvo presente la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, con un cordón policial de seguridad en las inmediaciones del edificio ante la protesta vecinal.
Se trata de un edificio que reparte 160 viviendas, las cuales nunca llegaron a las manos de las familias beneficiadas por el Plan Procrear, las cuales esperaban tener casa propia.
Lo sucedido va en concordancia con la Resolución 764/2025 que se publicó en el Boletín Oficial, la cual instruye a ejecutar las disposiciones del Decreto 1018/2024 de noviembre pasado, el cual termina con la figura jurídica del fideicomiso Procrear.
Por su parte, el Banco Hipotecario continuará con la gestión de préstamos mientras que los bienes inmuebles serán transferidos a la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE) o redistribuidos entre provincias y municipios.
De tal modo, esta Resolución que lleva la firma del ministro Luis Caputo le otorga facultades a la Secretaría de Obras Públicas del Ministerio de Economía para que disponga de los bienes dentro del fideicomiso disuelto.
El Procrear se había creado en 2012 durante el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, y funcionaba como una política de estímulo al crédito hipotecario y al acceso a la vivienda. Funcionaba con un fideicomiso administrado por el Banco Hipotecario, el cual también gestionaba los créditos y las tierras fiscales urbanizadas por el Estado.
Fin del Procrear: la “apropiación” del edificio Sagol
El Gobierno de la nación avanza con el desmantelamiento del Plan Procrear y esta tarde decidió quitarle 160 viviendas a beneficiarios del programa para otorgárselas a las fuerzas federales.
Se trata del edificio Sagol de Avellaneda, el cual cambió de manos por decisión del gobierno libertario. Ante el malestar vecinal, Armando Bertolotto del Frente Renovador de esa localidad, brindó su apoyo: “Como dirigente, van a contar con todo nuestro apoyo en la defensa de sus derechos adquiridos”.
Al ser consultado sobre la decisión del Gobierno, expresó: “Me parece una aberración. Este edificio fue construido con dinero del Estado mediante el plan Procrear y fue legítimamente adjudicado a 160 familias de Avellaneda”.
A su vez, remarcó que los beneficiarios originales ya habían cumplido con los requisitos crediticios para acceder a una hipoteca a treinta años, financiada por el Banco Hipotecario Nacional. “Se trata de familias para las cuales sería su primera casa, una oportunidad concreta de salir del alquiler eterno”, se lamentó Bertolotto ante Avellaneda Hoy.
El Procrear tenía como característica que la primera cuota se pagaba el mismo día que se ocupaba el departamento, lo que era un estímulo a la casa propia debido a la dificultad de tener que pagar un alquiler para vivir en otro lado mientras se paga un préstamo hipotecario.
El dirigente del FR reflexionó sobre la quita de las viviendas a los beneficiarios para dárselo a las fuerzas de seguridad: “Parecería que buscan premiar a quienes reprimen a los jubilados y a todo aquel que se manifieste contra el brutal ajuste económico al que están sometiendo a nuestro pueblo”. Y cerró: “Es una decisión que no tiene ningún sentido desde lo social ni lo humano”.
Por otro lado, Bertolotto contó el drama y la decepción de los vecinos que les quitaron el sueño de la casa propia: “Están atravesando una profunda decepción y una gran tristeza. Muchos ya estaban comprando sus muebles, ilusionados con mudarse”.
Por último, fue consultado sobre si el gobierno hubiese podido otorgarle otro espacio a las fuerzas federales que se quedan con el edificio: “En Avellaneda hay más de 3.000 viviendas cuya construcción está paralizada por el Gobierno Nacional”, expresó.
Y concluyó: “Pero evidentemente prefieren gastar en gas pimienta antes que en soluciones habitacionales. Parece que su consigna fuera más destruir que construir”.