El Hospital Garrahan atraviesa momentos críticos tras la desidia a la que son sometidos sus profesionales por parte del desfinanciamiento del gobierno de Javier Milei.
Durante esta tarde, en una asamblea que reunió a la junta interna de ATE con todos los sectores del Garrahan, se decidió avanzar este jueves hacia un paro general de todo el hospital con una movilización al Ministerio de Salud de la Nación a las 13.
A su vez, y medio del paro de 96 horas que los residentes iniciaron ayer, el gremio de la Asociación de Profesionales y Técnicos (APyT) del Hospital Garrahan presentó una denuncia penal contra las autoridades del centro pediátrico por “incumplimientos de deberes” y “abandono de pacientes”.
La situación de los trabajadores del hospital se deteriora con el paso del tiempo, y si bien se trata de un declive de años, señalan que se profundizó desde el año pasado bajo la gestión libertaria.
La semana pasada hubo un paro por 72 horas sin guardias, donde se garantizó la atención de urgencias. En esta ocasión, desde ayer hasta y hasta jueves se reitera una nueva medida de fuerza por 96 horas de residentes con la inclusión de toda la planta desde el jueves.
El principal reclamo nace a partir del faltante de profesionales en el hospital que renuncian debido a los bajos salarios. Por ello, sumado a “deterioradas condiciones de trabajo”, es que el Garrahan atraviesa momentos de preocupación.
En tanto que el viernes habrá una audiencia pública en el Congreso de la Nación para exigir una “ley específica” al poder legislativo, para así poder garantizar un “funcionamiento y financiamiento estable” del Hospital Garrahan.
Motosierra a la salud
El destrato del gobierno nacional a la salud pública no es una novedad, y es parte del plan de ajuste que implementa en todas las áreas del Estado, tal como ocurre ante la ciencia que también resiste los embates.
En este sentido, la secretaria general de APyT, Norma Lezana, relató la situación crítica de los trabajadores: “El conflicto se originó por la falta de profesionales, que entró en una pendiente inédita en caída, desde que asumió el presidente Javier Milei”, inició.
Contó que se manifestaron frente a la Dirección del hospital tanto jefes como médicos y médicas de distintos sectores para “exigir respuestas ante la falta de cobertura de guardias en las más de 500 camas del hospital”.
En ese sentido, Lezana afirmó que renunciaron más de 200 trabajadores “que no han sido reemplazados” y que ello se agrava debido al paro por tiempo indeterminado del personal de médicos residentes.
Los médicos residentes son una parte esencial del equipo de salud y “no llegan a ganar 750 mil pesos”, le confió la secretaria de APyT, en diálogo con Noticias Argentinas. Y añadió: “Son salarios de miseria inéditos en los 37 años de historia de Garrahan”.
En cuanto a obtener respuestas, no parecen estar cerca: “Las autoridades del hospital, lejos de brindar soluciones, respondieron mediante una nota institucional solicitando que los propios jefes armen un plan de contingencia para sostener la atención”, contó Lezana.
Y agregó que dicho pedido les implica, además de tener salarios bajos, una “exigencia a los profesionales para que permanezcan más allá de su jornada laboral habitual, sin considerar sus responsabilidades familiares ni su calidad de vida”.
Y concluyó: “La jornada mínima del Garrahan es una ‘jornada extendida’, así se pactó desde la creación del hospital para brindar una máxima atención de calidad interdisciplinaria y sin pluriempleo”. Pero alertó: “Hoy esto ya es insostenible”.
El comunicado de la jefatura del Hospital Garrahan
En el día de ayer, se reunieron jefes de distintas especialidades del Hospital Garrahan y brindaron una conferencia de prensa con discurso para alertar la situación crítica por la que atraviesan.
Primero hicieron un repaso que pone en valor al Garrahan: “No es solo un hospital, es el centro de referencia nacional en salud pediátrica de alta complejidad”. Allí, se tratan niños con cáncer, cardiopatías, enfermedades neurológicas, y enfermedades muy poco frecuentes, además de la realización de trasplantes de órganos y médula ósea.
A su vez, el hospital cuida a bebés que nacen con patologías complejas y acompañan a niños y niñas de todo el país, sin barreras económicas.
En otra parte del comunicado, señalaron: “Cada profesional que atiende, representa años de formación rigurosa, experiencia y compromiso. Formar a un especialista en este tipo de patologías no lleva meses, lleva años, décadas, y ese capital humano hoy está en peligro”.
Y profundizaron: “Profesionales altamente capacitados han renunciado para buscar mejores condiciones en otras instituciones del país o del exterior. Quienes decidimos quedarnos a sostener una enorme vocación, pero a costa de su salud física y emocional, recurren al pluriempleo, afrontan jornadas extenuantes y ven afectado su rendimiento en un contexto de alta complejidad”.
Luego agregaron algunos datos: “Las guardias, que sostienen la atención de más de 250 pacientes internados en cuidados moderados, 110 en unidades de terapia intensiva y alrededor de 450 consultas diarias, están cada vez más difíciles de cubrir”.
En este contexto aseguraron que no fueron recibidos por el Ministerio de Salud y que la situación de lo residentes es insostenible “con sueldos por debajo de la canasta básica” y que incluso “peligra la continuidad de los programas de formación”, lo que compromete el recambio generacional.
Por último, señalaron: “El Garrahan es un orgullo nacional. Si se derrumba, se derrumba tanto la red pública como privada de atención infantil de alta complejidad”. “Cuidar al Garrahan es cuidar a nuestros niños. Defenderlo es defender el futuro. El Garrahan no puede esperar más”.