El 21 de febrero de 1972, el ex Presidente Juan Domingo Perรณn publicรณ un texto de su autorรญa denominado โMensaje Ambiental para los Pueblos y Gobiernos del Mundoโ. A 52 aรฑos de su elaboraciรณn, se presenta como un antecedente de otros documentos con la misma orientaciรณn y de escala universal, como la Encรญclica Laudato Si del Papa Francisco expuesta en 2015.
En esta ocasiรณn, Nota al Pie analiza los debates actuales sobre los desafรญos ambientales desde una mirada nacional.
Una reacciรณn mancomunada para detener la marcha suicida
Asรญ convocรณ el ex Presidente de Argentina a la poblaciรณn internacional y su dirigencia para ponerle un freno a la tendencia que se profundizaba en el sistema capitalista de la รฉpoca. El dirigente alertรณ sobre el colapso del sistema social y productivo en el marco de la agudizaciรณn de la bipolaridad que enfrentรณ a Estados Unidos con la Uniรณn Soviรฉtica (URSS). En la antesala de lo que representarรญa su regreso al paรญs y su tercera presidencia, Perรณn mencionรณ al ser humano como una โpoderosa fuerza biolรณgicaโ que no podรญa concebirse independiente del medio que habรญa creado.
En ese sentido, planteรณ que la humanidad estaba cambiando las condiciones de vida con tal rapidez que no llegaba a adaptarse a las mismas. โLas mal llamadas sociedades de consumo son, en realidad, sistemas sociales de despilfarro masivo, basados en el gasto porque el gasto produce lucroโ, definiรณ Perรณn. En ese marco, realizรณ una crรญtica a โlos paรญses tecnolรณgicamente mรกs avanzadosโ que consumรญan recursos naturales โaportados por el Tercer Mundoโ. En efecto, encuadrรณ al problema desde una perspectiva econรณmica con eje en la dicotomรญa centro-periferia. Los paรญses perifรฉricos sufrรญan hambre, analfabetismo y enfermedades; pero los centrales tenรญan vicios que degradaban su dignidad humana.
A su vez, Perรณn seรฑalรณ al exterminio animal; la contaminaciรณn ambiental; la toxicidad del aire; el acceso al agua dulce; la erosiรณn del suelo; la carrera armamentรญstica; y el โcrecimiento explosivo de la humanidadโ como sรญntomas concretos de la marcha suicida de la humanidad.
Frente a ese escenario, formulรณ una serie de premisas para revertir el estado de situaciรณn. Entre ellas, hizo รฉnfasis en una โrevoluciรณn mentalโ de la concepciรณn del hombre sobre su relaciรณn con la naturaleza que supere el materialismo hedonista y el progreso ilimitado para transitar hacia una utilizaciรณn racional y soberana de los recursos naturales. Un paradigma que cuestione el โamerican way of lifeโ y su obsesiรณn por el lucro que promulgaba el Occidente liderado por Estados Unidos.
Por otro lado, convocรณ a planificar el -hasta entonces- descontrolado crecimiento demogrรกfico; y a la lucha coordinada contra los problemas ambientales en espacios multilaterales como Naciones Unidas. Segรบn su visiรณn, todos estos desafรญos debรญan ser apalancados por la bรบsqueda del pleno desarrollo de la personalidad humana.
En su Mensaje Ambiental, Perรณn promovรญa la justicia social, la soberanรญa polรญtica y la independencia econรณmica como baluartes del Tercer Mundo para superar ese escenario.
El Cuidado de la Casa Comรบn
43 aรฑos despuรฉs, en mayo de 2015, otro argentino elaborรณ y publicรณ un documento de escala internacional que tuvo gran repercusiรณn. El ex cardenal jesuita del barrio porteรฑo de Flores, Jorge Marรญa Bergoglio, ya consagrado como Papa Francisco dos aรฑos atrรกs, compartiรณ su cรฉlebre Encรญclica Laudato Si. En un contexto de crisis internacional sistรฉmica de mรบltiples dimensiones y niveles, el Jefe de la Iglesia Catรณlica produjo un texto que problematizรณ la cuestiรณn ambiental bajo el lema: โCuidado de la Casa Comรบnโ.
Bajo una concepciรณn del planeta no como un globo universal que aplana las diferencias sino como un poliedro pluriversal integrado por diferentes caras y matices, el Sumo Pontรญfice planteรณ que la desigualdad era estructural. En continuidad con el planteo de Perรณn, expresรณ que la lucha por el cuidado del medio ambiente era indisociable de la lucha por la justicia social. En caso de afrontarla por separado serรญa inรบtil o insuficiente. Segรบn sus propias palabras, la temรกtica abordada por la Laudato Si es โla รญntima relaciรณn entre los pobres y la fragilidad del planetaโ que interpele al ser humano y sus formas de gobierno y organizaciรณn polรญtica a nivel internacional.
En lรญneas generales, la propuesta de Francisco se basรณ en cinco ejes. El primero contempla la promociรณn del diรกlogo ecumรฉnico y multidisciplinario como estrategia. El segundo enfatiza en la bรบsqueda de una ecologรญa integral que equilibre al ser humano, la sociedad y la naturaleza, y tenga a la comunidad como destino. En tercer lugar, la centralidad de los โdescartadosโ del sistema para revertir el sufrimiento de la humanidad en general. El cuarto hace hincapiรฉ en el destino comรบn de los bienes como expresiรณn de dicha justicia social. Por รบltimo, expone una visiรณn de Tercera Posiciรณn que supere el materialismo hedonista y el ecologismo antidesarrollista.
La agenda ambientalista
A medida que los debates sobre la problemรกtica ambiental fueron aumentando, en el plano de la polรญtica se desarrollaron instituciones de gobierno comprometidas con dicha agenda. A seis meses del lanzamiento de Laudato Si, los lรญderes mundiales firmaron el Acuerdo de Parรญs en la Conferencia de Naciones sobre el Cambio Climรกtico (COP 21), celebrada en Francia. El mismo, legalmente vinculante desde 2016, establece objetivos de largo plazo orientados a avanzar en economรญas que reduzcan las emisiones de carbono como mรฉtodo para contener el calentamiento global.
Si bien 193 fueron los paรญses firmantes del acuerdo, al interior conviven diferentes miradas para abordar la cuestiรณn ambiental que se agudizaron con el correr de los aรฑos. En la COP 28 celebrada en Dubรกi en noviembre de 2023, la elaboraciรณn del documento final dio cuenta de ello. Mientras algunos referentes criticaron que entre las lรญneas de trabajo no se hayan incluido restricciones concretas a la producciรณn de combustibles fรณsiles o la descarbonizaciรณn, otros cuestionan que el financiamiento estรฉ orientado a paรญses de ingresos medio cuyas economรญas crecen de acuerdo a estas รกreas.
De hecho, en la รบltima cumbre de la Organizaciรณn de Paรญses Exportadores de Petrรณleo (OPEP), que reรบne a los principales productores de crudo a nivel internacional, se realizรณ una advertencia a los discursos ambientalistas. En la previa al encuentro, el funcionario de Kuwait, Haitham al-Ghais, seรฑalรณ que las ideas que desalientan la inversiรณn en petrรณleo โsรณlo conducirรก al caos energรฉticoโ y que, por el contrario, hay que trabajar por โuna transiciรณn ordenada, integradora y que contribuya a garantizar la seguridad energรฉtica para todosโ.
Un modelo sustentable desde una perspectiva austral
Paรญses del Norte Global como Estados Unidos, Canadรก, el Reino Unido de Gran Bretaรฑa y Alemania son los impulsores de planes de financiamiento para promover la transiciรณn energรฉtica en paรญses de ingresos medios, y curiosamente engrosan la lista de las naciones con mayores emisiones de carbono. Si bien China encabeza el registro, y otros Estados como India y los de la regiรณn arรกbiga cuentan con รญndices preocupantes, queda en evidencia que quienes alientan agendas de compromiso ambiental son las naciones centrales que mรกs emiten. En la jerga cientรญfica, deudores en relaciรณn a la huella de carbono.
Por el contrario, Amรฉrica del Sur y รfrica son continentes cuyos paรญses son acreedores de esta misma huella, una realidad que contradice los discursos provenientes de la Uniรณn Europea y otros foros internacionales conducidos por lรญderes atlantistas cuyo interรฉs radica en detener la industrializaciรณn de los paรญses en desarrollo. A medida que se intensifica la disputa geopolรญtica, las naciones emergentes discuten con mayor fuerza los argumentos de las naciones centrales e intentan reordenar el compromiso ambiental a expensas del desarrollo humano integral.