Este 18 de junio Paul McCartney cumple 81 años y la edad es un mérito considerando lo difícil que podría ser llegar a tal número con una vida como la suya. Vivir la euforia y cargar con el peso de una banda como Los Beatles parece más que suficiente, pero la lista sigue.
McCartney fue miembro fundador del cuarteto de Liverpool que compartió con John Lennon, George Harrison y Ringo Starr, la historia deja entrever que, en cuanto a la música, no se privó de nada.
Detrás de los shows en La Caverna Club y del reciente anuncio de un nuevo tema de los “Fab four” con Inteligencia Artificial, hay un mismo hombre que en diferentes situaciones logró ser otros. No como un loco ni un impostor, sino como aventurero en las profundidades de la música.
¿Pero cómo fue ese beatle por fuera de Los Beatles? Al respecto, Nota al Pie dialogó con Julio Martínez, periodista y autor de la primera biografía argentina sobre el músico.
Sobreviviendo a la canción perfecta
En 2021, Julio Martínez publicó lo que podría definirse como la primera biografía argentina de Paul McCartney. Bajo el título McCartney. Sobreviviendo a la canción perfecta, el libro se sumó a los proyectos que el periodista lleva adelante combinando su pasión por la música y el periodismo. Entre ellos un blog y un programa de radio (Calico Skies) dedicado exclusivamente a la obra del beatle.
Sin embargo, McCartney. Sobreviviendo a la canción perfecta no es una expresión de la verborragia fanática, sino que es como lo define su autor parte de una militancia. Una militancia que tiene por objetivo que todes conozcan al músico más allá de Los Beatles. Que todes sepan que hubo un Paul McCartney antes de elles, pero también que hubo uno después.
Por eso, a lo largo del trabajo se encarga de presentar a los diversos “Pauls” que el propio McCartney encarnó. Como salvataje ante la presión beatlera, pero también ante esa búsqueda constante por hacer cosas nuevas y emerger de una condición que le seguía quedando pequeña.
En ese sentido es que el periodista narra al artista. Quiere hacer justicia acerca de una obra que fue menospreciada y opacada por aquella banda con la que dio el salto. Pero también, que lo fue inevitablemente por la muerte de Lennon que, de un momento a otro, pasó a ser el beatle sacralizado.
La propuesta -dice- trata de ser lo más objetiva posible. No obstante, el trabajo también permite identificar una premisa: con Paul McCartney todo, sin Paul McCartney nada.
Un músico inquieto
Desde sus inicios con Los Beatles y a lo largo de su carrera, McCartney construyó nuevos paradigmas para otres musiques. Agrupado o en solitario, se apropió de todo lo que estuvo a su alcance para crear y componer nuevas letras, nuevos sonidos. Sin embargo, la historia no fue justa con él y sólo el paso del tiempo reivindicaría sus batallas. Ya lo había anticipado: la carga de ser un beatle lo acompañaría por un largo tiempo.
Según Julio Martínez, en las etapas musicales más complejas del grupo McCartney fue quien puso el pecho y tuvo mayor incidencia en las producciones. “Por ejemplo, en Revolver (1966), el pionero fue él porque estaba metido en la vanguardia y le demostró al resto que había otras cosas por hacer”, dijo. Al mismo tiempo, aseguró que Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band (1967) “es un disco de Paul” y que el bajista también fue “la fuerza motora” de Abbey Road (1969).
A comparación del resto de Los Beatles, el periodista remarcó que “McCa” siempre fue el más ecléctico de los cuatro. “Se logró acomodar a distintos géneros y a distintas interpretaciones, ya sea en la composición, en el uso de instrumentos o como cantante”, sostuvo.
“Es un músico muy completo, multi-instrumentista. Puede hacer la mejor balada del mundo, pero también puede hacer un rock and roll furioso. Incursionó en el jazz y en la música clásica. Es muy difícil encapsularlo en algún lugar, porque es un músico inquieto”, agregó Martínez.
El fantasma de Lennon
Aunque las mejores composiciones llevan su firma, no todo fue fácil para Paul McCartney y el reconocimiento que un músico de su talla merecería tardó mucho en llegar. “McCartney siempre fue vinculado al bello burgués que escribía baladas. Pero si te pones a analizar bien, su obra contrasta mucho con esa idea”, dijo Martínez respecto a la épica del artista.
Pero la imagen de ese Paul sereno y obediente, digno de “yerno ideal”, no fue adrede. Más bien, se construyó paralelamente a la de un Lennon líder y contestatario. En ese sentido, el periodista comentó que durante mucho tiempo Paul fue desplazado a un segundo plano, “de una manera totalmente injusta”. “Como si Lennon hubiera hecho todo en los Beatles y no es así”, remarcó.
Asimismo, mencionó que hubo un momento particular de la historia que al autor de Yesterday “le jugó muy en contra”. El asesinato de John Lennon no sólo había manchado de sangre el comienzo de los ‘80, el canto por la paz mundial y la ilusión de un futuro retorno de Los Beatles. También provocaría un duro golpe a la carrera de quien había firmado junto a él la mayoría de las canciones. Si la vida con Lennon vivo era difícil, tras su muerte y pronta sacralización sería peor. “McCartney quedó relegado a los simples mortales”, sintetizó Martínez.
La muerte de Linda
Entre otras particularidades que descubrió a lo largo de su investigación para McCartney. Sobreviviendo a la canción perfecta, el autor mencionó el cambio que el músico sufrió tras enviudar en 1998. Linda Eastman había sido su compañera durante casi 30 años y la madre de sus cuatro hijes. Era fotógrafa profesional, pero en los 70 se introdujo en la música tras ser invitada a sumarse a Wings, la nueva banda de Paul.
Sin embargo, la pérdida provocó que el McCartney que había superado una depresión post-beatle, volviera a ser atormentado por las sombras de la muerte. Al respecto, Julio Martínez comentó que tras quedar viudo, no sólo su vida se vio afectada, sino también la música que comenzaría a componer.
“Las letras empezaron a ser más sombrías y empezó a usar acordes más tristes… cosa que no pasó tanto en la época de los ‘80 con Wings o los ‘90, mientras Linda estuvo con él”, señaló el periodista. “La tristeza se le notaba incluso en su apariencia, sobre todo en la mirada”, agregó.
El reconocimiento
Acerca de cómo cree que hoy es visto Paul McCartney, el periodista aseguró que “en los últimos tiempos las cosas se pusieron en su lugar” y que el músico “ya goza de más reconocimiento”. “La gente sabe un poco más sobre la historia de los Beatles, pero él también luchó mucho por eso”, sostuvo.
Entre las luchas que McCartney encarnó para “reivindicar” su propia obra y batallar con los fantasmas que le adjudicaron, Martínez mencionó en primer lugar el libro escrito por Barry Miles. Paul McCartney: Many Years from Now, salió en 1997 y se trata de la biografía oficial en la que el escritor trabajó a la par del beatle. Sin embargo, el reciente documental Get Back (lanzado a finales de 2021) fue una pieza clave para reconstruir al héroe que muchas veces fue acusado de villano.
“En el documental se nota que el que mandaba era él”, ratificó Martínez. Además, comentó que quienes no conocían la historia en profundidad, al ver Get Back “no podían creer todo lo que él hacía”. “No era para menospreciarlo tanto como sucedió años anteriores, como en los 90 o en los 2000… ahí fue terrible”, recordó.