Durante el plenario de las comisiones presididas por los legisladores Carlos Heller, del Frente de Todos y Facundo Manes, de Juntos por el Cambio, se debatieron proyectos de ley con lineamientos de investigación y desarrollo. En él, diversas organizaciones expusieron sus apoyos resaltando el perfil de ciencia y tecnología del desarrollo nacional. De acuerdo a lo debatido, los proyectos contarían con el consenso para que se emitan sus correspondientes dictámenes.
Crédito fiscal para Pymes
En una reunión informativa, la Cámara de Diputados comenzó el debate del proyecto de ley. A partir del mismo se introducirán modificaciones a la Ley 23.877 de Promoción y Fomento de la Innovación Productiva. También se dará la creación de un Programa de Incentivos, destinado a investigaciones y desarrollos tecnológicos en el ámbito productivo.
Así, desde la cartera de Ciencia y Tecnología plantearon que la amplificación del crédito es el sendero indicado para fortalecer al entramado de pequeños y medianos empresarios.
Por su parte, Fernando Peirano, presidente de la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica, comentó que “el instrumento reconoce las diferencias que hay entre las empresas por tamaño, región y actividad”. En consecuencia, la metodología de crédito tendrá un formato segmentado.
A partir de la horizontalización del crédito fiscal, las empresas que quieran desarrollar un proyecto de Investigación y Desarrollo (I+D) serán acreditadas por la Agencia. Y, a su vez, recibirán un reconocimiento del 80% equivalente a un crédito fiscal.
“No puede ser que en Argentina la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (I+D+i) sea lo que ocurre en un pequeño club de muy buenas empresas”, indicó Peirano en relación al escenario actual. Según su diseño, el beneficio será escalonado: la primera vez del 80%; la segunda del 65% y la tercera del 50%, que es el “estándar”.
A su vez, el director de la Agencia utilizó de referencia un informe del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) sobre el crédito fiscal en esa área. “Este es el instrumento para lograr adicionalidad cuando hablamos de inversión privada vinculada a la Ciencia y Tecnología”, explicó. En ese sentido, añadió que en términos tributarios no implica un gran gasto, pero sí un enorme beneficio en exportaciones, productividad y empleo”.
El apoyo de las organizaciones
El debate sumó los puntos de vista de diversos actores de la sociedad civil. Peirano manifestó la necesidad de “avanzar en un país con más ciencia y tecnología”. En esa línea, destacó la articulación entre la iniciativa estatal y la acción privada. Además, agregó que el nuevo proyecto de Crédito Fiscal potencia la inversión en investigación y desarrollo.
Asimismo, Pablo Giannavola, de la Asociación de Industriales Metalúrgicos de la República Argentina (ADIMRA), también respaldó la iniciativa. “Buscamos promover la sustentabilidad de la industria metalúrgica enfocándonos en la capacitación, la innovación y el desarrollo tecnológico”, expresó. Al igual que Peirano, Giannavola hizo énfasis en mejorar y potenciar las capacidades del sistema.
Carlos Pallotti, presidente de la fundación Clementina, puntualizó que “los sectores como la biotecnológica, la energía alternativa y el software producen ingresos, y vienen demostrando que son altamente generadores de divisas”.
En sintonía, Gabriel Ciccia de la Unión Industrial Argentina (UIA) resaltó la política de reforzar incentivos para agregar valor a la producción local. Finalmente, el Director Ejecutivo de Argencon, Luis Galeazzi, insistió en la “economía del conocimiento” como un factor sustantivo en ese mismo camino.