En los últimos cinco días, el nivel de casos de coronavirus fue en aumento, lo que generó un colapso de las Unidades Febriles de Urgencia (UFU) de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. En el Hospital Santojanni, un hombre que esperaba para ser hisopado golpeó al médico responsable de la Unidad.
En respuesta a este episodio de violencia la Asociación de Médicos Municipales (AMM) dispuso un paro de actividades en las UFU durante tiempo indeterminado. Funcionarán guardias donde sólo se hisopará a pacientes con criterio de internación.
El gremio reclama que las autoridades no dieron respuesta al pedido de garantizar la seguridad de les trabajadores de las UFU. Según AMM “las medidas gremiales irán en aumento en función de la respuesta obtenida. Este cese de actividades de las UFU es necesario para preservar la integridad de nuestros colegas”.
La causa del paro en las UFU
El presidente de la AMM, Jorge Gilardi, explicó la causa de la medida de fuerza: “En la jornada de ayer (en referencia al viernes 24) nosotros habíamos solicitado que no se habilitaran los testeos porque había poca capacidad y podía derivar en este tipo de cuestiones que terminaron sucediendo’’.
Tras la demora en la atención y en los resultados de los testeos, un hombre que estaba enojado porque no pudo ser hisopado pidió que se presentara Swarman, el médico responsable de la UFU, y luego lo agredió.
El profesional agredido declaró: “Hoy la gente vino más violenta. Hisopé 240 personas en cinco horas y había 400 personas. Se les avisó desde temprano que se dio número desde las 7 y media de la mañana y se avisó a las 11 que no había más números porque no había más posibilidad de atenderse”.
Luego del episodio violento, acudió al lugar el abogado de médicos municipales, que además realizaron una denuncia penal. “Obviamente cerramos las unidades febriles y no sé si vamos a atender porque los médicos tienen miedo de atender. Ya me aseguraron desde un ministerio que va a venir policía, que va a venir un coordinador general a suplantarme mañana”, declaró Swarman.
Y concluyó: “Mientras no vengan médicos del hospital a colaborar y seamos 2 ó 3 gatos locos para hisopar 400 personas nos van a seguir pegando y en algún momento nos van a matar. Porque por suerte la piña fue en la nariz’’.