
Ayer por la tarde, el Presidente Javier Milei recibió en Casa Rosada a 20 gobernadores para buscar puntos de acuerdo de cara a las reformas estructurales que planea en la recta final de su mandato. Posteriormente, celebró la reunión, a la que catalogó como “extremadamente positiva”.
Pasadas las 17 el encuentro tuvo lugar en el Salón Eva Perón, donde asistieron representantes de las 20 provincias invitadas, con la exclusión de Axel Kicillof (PBA), Gildo Insfrán (Formosa), Ricardo Quintela (La Rioja) y Gustavo Melella (Tierra del Fuego), por decisión del propio Javier Milei.
Tras el triunfo del gobierno en las elecciones legislativas nacionales y una reconfiguración más favorable en el Congreso, Milei llamó a los gobernadores no opositores para buscar consensos, principalmente de cara al Presupuesto 2026 y a la reforma laboral.
Posteriormente a la reunión, Javier Milei brindó una entrevista y reveló que hubo un “acuerdo aunque con matices”, sobre “lo que necesita la Argentina en esta etapa”.
Contó que primero se discutió sobre el Presupuesto 2026 donde aclaró que “el déficit cero es una política de Estado”. Y celebró que las provincias “hicieron un ajuste de un poco más de tres puntos. Estamos todos laburando en la misma línea”.
Por otra parte, reveló que “hay consenso absoluto para la reforma laboral” y que la misma “le va a cambiar la vida” a los pequeños y medianos empresarios, en diálogo con A24. Asimismo, aseguró que la gente “no va a perder derechos”, pese a no profundizar sobre cuestiones que se plantean tales como las jornadas hasta de 12 horas de trabajo o la implementación del ticket canasta en lugar del salario.

Los excluidos por Milei y la postura de Kicillof
Para la reunión en Casa Rosada no estuvieron invitados los gobernadores opositores al gobierno nacional. El presidente Milei justificó la decisión bajo la excusa que es “muy difícil tener un diálogo razonable”.
En un pasaje de la entrevista televisiva que otorgó Milei, aseguró: “No nos podemos juntar con gente a la que dos más dos no le da cuatro”, en referencia a Kicillof, Insfrán, Quintela y Melella.
Ante el ninguneo y la descalificación, Kicillof salió a responder: “Que no estemos de acuerdo y que no pueda sentarse discutir, conversar e intercambiar puntos de vista habla de las limitaciones que tiene”.
Y añadió que el Presidente comete un error al excluir a ciertos gobernadores: “Mi intención es intercambiar seriamente, respetuosamente. A mi no me pueden achacar ni insultos, ni maltrato y no lo he hecho a pesar de que él lo tiene por deporte. Yo soy número fijo para el insulto”, consideró.
A su vez, agregó: “Está bien que se plantee que hay cuestiones con las que no estamos de acuerdo pero tiene que poder convivir Milei con las diferencias”.
Por otro lado, Kicillof recordó lo sucedido cuando él ganó las elecciones provinciales: “En septiembre nosotros ganamos por una diferencia enorme y yo hice lo contrario”, en referencia sobre su invitación al Presidente para el diálogo.
Por último, puso de relieve la razón de la reunión con los gobernadores: “El gobierno está construyendo la foto que le pidió Trump y Bessent”, en referencia al presunto pedido por una construcción de acuerdos con la oposición.

La reacción de los gobernadores tras la reunión
Algunos de los 20 gobernadores que asistieron a la reunión que convocó Javier Milei en Casa Rosada se pronunciaron sobre lo sucedido puertas adentro.
Uno de ellos fue el jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, quien a través de X indicó: “Si al país le va bien, a la ciudad le va a ir mejor”.
En su posteo, valoró “el gesto de Milei” por la convocatoria y que es necesario “sostener estos ámbitos para avanzar hacia los cambios y reformas que los argentinos necesitamos”.
Y agregó que es necesario “transmitir certezas para los que trabajan y quieren invertir en nuestro país”, y que para ello “el presupuesto es la ley madre para lograrlo”.
Por su parte, el gobernador de Tucumán, Osvaldo Jaldo, expresó: “Ratificamos nuestra vocación de diálogo y cooperación institucional, convencidos de que el entendimiento y el respeto mutuo son el camino para construir una Argentina más justa y federal”.
Destacó que mantendrán un espíritu colaborativo y que esperan reciprocidad: “Queremos que las políticas nacionales también acompañen el esfuerzo de las y los tucumanos”, adelantó Jaldo.
Y finalizó sosteniendo que acompañarán las medidas que “mejoren la vida de nuestra gente, siempre defendiendo el federalismo y el desarrollo equilibrado de todas las regiones”.
En un tono más demandante se pronunció el gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés, quien planteó la necesidad de una “compensación de las cajas de jubilación” y la “reactivación de las obras públicas nacionales que fueron acordadas mediante un convenio firmado el 11 de julio de 2024 con el Jefe de Gabinete”.
Por último, mostró “predisposición para avanzar hacia las transformaciones que el país necesita”, pero que para ello necesitan “más diálogo pero también más hechos, porque es lo que los argentinos nos demandan”.

