En el marco del Día Internacional para Eliminar la Violencia contra las Mujeres y los 16 días de activismo (del 25 de noviembre al 10 de diciembre), el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) y ONU Mujeres en Argentina lanzaron “Son más que números”. Se trata de una campaña que busca visibilizar la dimensión humana que hay detrás de cada femicidio, la expresión más extrema de la violencia contra mujeres y niñas.
En Argentina, de acuerdo a la encuesta de prevalencia de la Iniciativa Spotlight (2022), el 45% de mujeres atravesó situaciones de violencia de género en sus vidas. Asimismo, según la Corte Suprema de Justicia de la Nación, en 2023 se registró 1 femicidio cada 35 horas, es decir, 272 víctimas fatales a lo largo del año. Sin embargo, los femicidios no son solo estadísticas: son crímenes que dejan una huella irreparable en familias y comunidades. Por esta razón, es fundamental recordar a las víctimas por sus nombres, historias, y lo que podrían haber sido y no fueron.
En este sentido, la campaña es un llamado a la acción para reflexionar y recordar a las víctimas y también para destacar la implementación y el fortalecimiento de medidas efectivas de protección y prevención, además de promover el compromiso de toda la sociedad en su conjunto para poner fin a la violencia contra las mujeres. El spot principal destaca historias personales y el impacto que los femicidios tienen en sus vidas y las de sus familias y amistades. Es así que, por ejemplo, destaca un impacto: en Argentina, según la Corte Suprema de Justicia de la Nación, al menos 2.047 niños y niñas se quedaron sin madre a causa de los femicidios.
Mariana Isasi, jefa de Oficina de UNFPA, expresó que “la violencia contra las mujeres no es un problema individual sino que atraviesa a toda la sociedad”. Por ello, sostuvo que es fundamental el compromiso de todos los sectores sociales para garantizar la protección de mujeres y niñas “Esto implica un abordaje integral que incluya la prevención, la asistencia a las víctimas, la sanción a los agresores, y la promoción de la igualdad de género en todos los ámbitos”, explicó.
Por su parte, Magdalena Furtado, oficial a cargo a.i. de ONU Mujeres en Argentina y coordinadora de programas en Uruguay, agregó que “la violencia hacia mujeres y niñas puede y debe prevenirse”. “Hacemos un llamado a la acción para abordar las causas profundas de esta violencia que tiene su origen en las desigualdades estructurales entre hombres y mujeres”, afirmó.
Un gobierno de retrocesos
Por otro lado, Amnistía Internacional advirtió sobre un preocupante retroceso en las políticas públicas destinadas a prevenir y erradicar la violencia de género en un contexto donde, según datos de la Defensoría del Pueblo de la Nación, se registró un femicidio cada 29 horas durante el primer semestre de 2024.
La organización enfatizó en la transformación que sufrió la Línea 144 desde que asumió el nuevo gobierno, la cual estuvo “históricamente dedicada atender llamadas de emergencia de mujeres en situación de violencia de género, y pasó a ser un servicio genérico para atender a cualquier persona en situación de violencia”.
“El Estado ya no cuenta con una línea especializada para combatir las violencias que sufren las mujeres y personas LGBTIQ+ en razón de su género, en total desconocimiento de sus obligaciones internacionales para garantizar que mujeres y niñas puedan vivir una vida libre de violencias”, señalaron. Como consecuencia, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) exhortó al Estado argentino a sostener sus políticas para prevenir y combatir la violencia de género bajo el riesgo de incurrir en responsabilidad internacional, en el marco de una audiencia temática en la que el gobierno rindió examen ante el reproceso en políticas de género.
En esa línea, Amnistía Internacional aseguró que desde diciembre de 2023 el gobierno desmanteló las políticas públicas que tienen por objeto garantizar y proteger los derechos de las mujeres, niñas, adolescentes y personas LGBTI+. En ese sentido, aseguraron que la actual gestión “niega la existencia de la violencia de género, lo que obstruye la implementación de políticas públicas eficaces para su prevención y erradicación, perpetuando así la desigualdad y poniendo en riesgo sus vidas”.
Es la primera vez en treinta y siete años, que Argentina carece de un organismo con competencias específicas para la atención y prevención de la violencia de género. “El proyecto de ley del Presupuesto Nacional para 2025 enviado por el poder ejecutivo, no contempla erogación alguna para la implementación de la Educación Sexual Integral y del programa Acompañar y no contiene una partida específica para la línea 144”, explicaron.
El Programa Acompañar, que asiste económicamente y brinda apoyo a mujeres en situación de riesgo para que puedan salir de relaciones violentas disminuyó drásticamente su cobertura: sólo 434 mujeres recibieron esta ayuda en el primer trimestre de 2024, mientras que en el primer trimestre de 2023 el programa benefició a 34.023 personas, lo que representa una reducción del 98.63%.
Además, durante 2024, el Estado paralizó la distribución de insumos esenciales a las provincias para garantizar el acceso a la interrupción voluntaria y legal del embarazo. Asimismo, numerosas provincias informaron faltante de stock de test de embarazos y de diversos métodos anticonceptivos, lo que afecta el derecho de mujeres, adolescentes y niñas a tomar decisiones libres sobre sus cuerpos. También se desmanteló el Plan Nacional de Prevención del Embarazo No Intencional en la Adolescencia (Plan ENIA) que logró reducir en tan solo 4 años la tasa de fecundidad adolescente en un 49%.
Para finalizar, la organización recordó que en la Asamblea General de la ONU, Argentina fue el único país en votar en contra de la resolución sobre la prevención de la violencia contra mujeres y niñas en entornos digitales, en una votación que contó con 170 países a favor y 13 abstenciones. Este aislamiento en el ámbito internacional es un reflejo de la creciente desconexión del gobierno argentino con los compromisos globales en materia de derechos humanos.