La capital de Tailandia, Bangkok, superó esta semana los límites de contaminación del aire. Según información oficial brindada por las autoridades sanitarias, a lo largo del país, 200.000 fueron hospitalizadas por inconvenientes respiratorios.
Desde 2019, la ciudad, que cuenta con 11 millones de habitantes, presenta altos niveles de contaminación en el aire. Ha alcanzado entre los 152 y 195 puntos en el Índice de Calidad de Aire (ICA), mientras que el nivel satisfactorio se sitúa por debajo de los 50 puntos. En lo que va de este año, más de 1,3 millones de personas se enfermaron a raíz de la insalubridad del aire.
El Ministerio de Salud Pública de Bangkok recomendó a les residentes evitar actividades al exterior y, en caso de circular por la vía pública, pidieron a les habitantes de la metrópolis que utilicen máscaras N95 (equivalente a FFP2). Además, advirtió que para les niñes, las mujeres embarazadas y las personas con problemas respiratorios o cardíacos podría ser perjudicial salir de sus viviendas.
Emisión de gases: el tráfico y la industria, los principales responsables
Hace semanas que Bangkok se encuentra inmersa en una espesa niebla. Se trata de un smog tóxico que proviene de las fábricas industriales y el humo provocado por la quema de cultivo, pero sobre todo de las emisiones de los vehículos. Según el Departamento de Control de la Contaminación de Tailandia, las emisiones vehiculares representan casi el 60% de las bruma química de la ciudad.
La escasez de espacios verdes, la gran cantidad de autos, las pocas carreteras y la concentración industrial, son algunos de los principales factores que mantienen a Tailandia constantemente en alerta y preocupación respecto a los límites de contaminación del aire. Además, aparecen como otras problemáticas la construcción y los incendios del sector agrícola.
Por estas razones, la contaminación del aire representa un problema recurrente durante la estación seca, entre octubre y abril. En esas épocas, las autoridades piden a les ciudadanos que eviten salir. También solicitan que trabajen desde sus casas y que opten por el transporte público en caso de que necesiten desplazarse.
El gobierno de Bangkok en febrero prohibió “estrictamente” la circulación de vehículos con motores diésel con emisiones superiores a la norma estipulada por las carreteras. Además, solicitaron que la población se abstenga de realizar quemas a cielo abierto, ya sea del pasto o de desechos, una práctica habitual en la temporada seca en el país.
Contaminación atmosférica en Bangkok
Durante esta semana, los 50 distritos que conforman la capital registraron niveles de partículas finas (PM 2,5) muy superiores a los límites de prevención. Aquellas partículas penetran directamente en los pulmones y son consideradas sumamente peligrosas.
En el barrio central de Pathumwan se registró un nivel de 70 microgramos por metro cúbico en las últimas 48 horas. Una concentración superior al valor de referencia anual de calidad del aire de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La OMS recomienda que las lecturas medias anuales de PM2,5 no superen los 5 microgramos por metro cúbico, tras modificar sus directrices el año pasado. Según indica la OMS, las concentraciones bajas causan riesgos significativos para la salud de les habitantes. Actualmente, el nivel en Bangkok y sus alrededores es de 70,5 microgramos por metro cúbico.
Si bien Bangkok se encuentra entre las diez ciudades que presentan mayor contaminación atmosférica, a principios de marzo 13 ciudades del norte de China que rodean la capital, Pekín, han emitido alertas por contaminación. Según fuentes oficiales, se piensa que la recuperación industrial de la región puede estar generando aumentos en los niveles de polución.
Las ciudades, que contemplan el centro siderúrgico de China, emitieron alertas “naranja” por contaminación grave. Es la segunda alerta más alta, según informó el Centro Nacional deInvestigación Conjunta para Abordar Problemas Clave en el Control de la Contaminación Atmosférica (NJRC).