Una de las mediciones es el resultado de un estudio, reciente, implementado por el Instituto de Estudios de Consumo Masivo (INDECOM). El relevamiento de precios se enfocó sobre los principales productos que suelen ser consumidos durante las fiestas de fin de año. El sondeo registró una suba de precios que, en términos interanuales, hasta triplica los valores de 2021 en varios productos.
Ante las próximas celebraciones festivas, la institución relevó precios de bienes de consumo masivo en distintos puntos de venta. Productos como sidras, budines, panes dulces, vinos y bebidas espumantes, turrones, golosinas, duraznos enlatados, así como también los principales cortes de carne estuvieron entre los productos considerados.
Miguel Calvete, Director del organismo, advirtió que la suba de precios se ubica en un 107% anual en cuanto a la canasta navideña. El relevamiento fue realizado sobre 132 grandes supermercados y 345 autoservicios de proximidad en el ámbito de Ciudad de Buenos Aires, Conurbano, Rosario, Mar del Plata, Paraná, Córdoba, Posadas, Corrientes, Mendoza, Salta, Jujuy y Tucumán”.
Especulación y formadores de precios
Consultado por Nota al Pie acerca de la postura especulativa de los grandes distribuidores, señalada en el estudio, el Director del Instituto, sostuvo que la especulación se da por lo general en el caso de aquellos que tienen capacidad de stock (industrias, distribuidores, mayoristas, supermercados).
“No así, en los comercios de cercanía, almacenes, autoservicios chinos, despensa de barrio, todo lo que es puntos de cercanía”, aclaró Calvete. Sin embargo, estos suelen aumentar sus precios por “la falta de certidumbre que hay en lo que respecta en economía” (sobre el valor de reposición de un producto o sobre la inflación).
En este sentido, el referente INDECOM expresó que: “Muchas veces, por las dudas, aumentan el precio, pero básicamente no podemos decir que sea por especulación, sino, por una cuestión de desconocimiento en función del precio de reposición”.
Además, agregó que la verdadera conducta especulativa de los oferentes del mercado, se da en los casos de las grandes cadenas, distribuidores, mayoristas y grandes industrias. “Aquellos que sí son los principales formadores de precios”.
“No nos olvidemos que en Argentina son un poco más de 40 compañías las que producen un 50% de todo lo que consumimos, en todo lo que vemos, en alimento, limpieza, bebidas, higiene; y el otro 50% es de 12 mil pymes”. El Director se refirió a un escenario dónde algunos actores ocupan posiciones dominantes en el mercado y “ahí es donde hay que hacer hincapié.
Para el ISPECI el aumento de la cena navideña fue del 120%
Por otro lado, un estudio paralelo, fue realizado por el Instituto de Investigación Social, Económica y Política Ciudadana (ISEPCI). Este sondeo se basa en el diseño de un Índice Barrial de Precios (IBP). El relevamiento se realizó en negocios de cercanía del conurbano bonaerense.
Esta entidad publicó sus resultados y los comparó con los índices del Instituto Nacional de Estadística y Censo (INDEC). El Director Nacional del ISEPCI, Isaac Rudnik, señaló que una cena navideña (compuesta de 22 productos) para una familia de dos adultes y dos hijes pequeñes costará al menos $6.785 si optan por un pollo de 2,5kg, y $8060 si lo reemplazan por una tira de asado de 2kg.
En el mismo mes de diciembre, pero del año 2021 (variación interanual), “la misma familia debió gastar $3089 para la primera opción, o $4254 si optaba por el asado, lo que significan incrementos del orden del 120%”, así lo consignó el informe del Índice Barrial de Precios de dicho Instituto.
“En el mes de noviembre la suba mensual de la Canasta Básica de Alimentos (CBA) fue del 4,17% en la medición del IBP, y de 3,1% según el INDEC”. Según el instituto, esto se traduce en una desaceleración de los incrementos de precios, “que en octubre habían sido de 7,7% para el IBP, y 9,5% en la publicación del INDEC”.
No obstante, el ISEPCI, aclara que la medición anual de aumentos, de meses anteriores, de la “misma canasta” fue del 98,4% (IBP) y 101% (INDEC). A pesar de este comportamiento de los precios, los aumentos de la Canasta Navideña y la de Año Nuevo superaron lo registrado por ambos relevamientos, en base al mismo conjunto de productos durante el año corriente.
Participación y competencia para combatir la formación de precios
Miguel Calvete, advierte que las políticas de control de precios nunca fueron eficaces “en la medida que no se han sentado todas las partes”. En este sentido, afirma que no están integrados todos los actores de la cadena de valor (sólo grandes industrias y grandes supermercados). Así, estas políticas de control no fueron más que una sucesión de acuerdos.
“Entonces, si no incluimos PyMES (Pequeñas y Medianas Empresas), almacenes, autoservicios mayoristas, proveedores de insumos e insumos primarios (packaging, hojalata, vidrio, químicos, envases larga vida) […] nunca va a haber una eficacia porque todos se echan la culpa de que son formadores de precios”, sostuvo el Director de INDECOM.
Calvete, además, alertó que uno de los grandes formadores de precio es el propio Estado. “En la compra, por ejemplo, de pan o un kilo de cerdo, un kilo de azúcar, una bebida se está comiendo o tomando entre un 45 y un 50% de impuestos. Ni hablar cuando carga combustible: un 60% y eso incide de manera directa en la logística en la distribución y por lo tanto en precios finales”.
Por estos motivos, el referente, subraya la importancia de federalizar la participación de las PyMES (generalmente, son terceras marcas que están por debajo de un 15 o 20% de los precios de mercado). “Aquí es donde, realmente, el gobierno tiene que poner el ojo, el Estado tiene que poner el ojo a pasar a participar a mayor cantidad de actores”, afirmó.
El Director del instituto destacó que “el arma más genuina para combatir la inflación es la generación de nuevos actores en la economía y la generación de competencias que es lo que hoy está faltando. Tal vez, la diversidad de marcas en manos de muy pocas grandes compañías es lo que realmente afecta al mercado”.
Los números del INDECOM en detalle
El instituto informó que “los artículos que más subieron son el budín de frutas de 250 gramos, que aumentó de $133 a $570 (+328 %), seguido por el turrón de pasta de maní de 100 gr, que pasó de $132 a $355 (+169 %), mientras que completando el podio aparece la pechuga de pollo por kg, que pasó de $350 a $910 (+160%)”.
En la misma sucesión de incrementos sigue la lata de durazno que se elevó de $206 a $520 (+153%). Luego, continúan las bebidas espumantes de 750 cc que treparon de $636 a $1430 (+125 %), “el asado de novillo por kilo, que aumentó de $590 a $1290 (+119%) y, después, el pan dulce con frutas de 500 gr, que pasó de $350 a $690 (+97%)”, según reza el informe.
Por último, el vino malbec reserva de 750 cc, que se incrementó de $575 a $1050 (+82%), el peceto de novillo por kilo, que aumentó de $1070 a $1800 (+68%) y la garrapiñada de maní de 80 gr que trepó de $185 a $230 (+24%)