La historia de Spider-Man está plagada de momentos icónicos desde su creación. Desde su primera aparición en 1984, el simbionte es uno de los personajes más populares. En un momento, el trepamuros descubre que su nuevo traje lo influencia y decide quitárselo. El equipo de Chip Zdarsky (Daredevil) y Pasqual Ferry se pregunta: ¿Y si no hubiera sido así?
Durante 2021 se publicó la serie limitada “Spider-Man: The Spider’s Shadow” (Spider-Man: La Sombra de la Araña) dentro de la línea “What If?”. En esta historia, Zdarsky y Ferry exploran los acontecimientos que derivan de la decisión de Peter Parker de conservar al simbionte. Con un set de portadas por Phil Noto para cada número de la serie, al igual que cada “¿Y si…?” se vuelve muy interesante.
Un cambio de parecer
La culpa es el motor de la mayoría de los héroes, y Peter Parker no es un caso diferente. Lo que lo hace particular es que su momento de culpa llega en su adolescencia, mientras se formaba como adulto. La historia comienza mientras Spider-Man se acostumbra al nuevo traje negro que trajo desde el espacio.
Sufre constantes pesadillas mientras el simbionte busca mezclarse con él sin que lo note. Cuando uno de estos sueños concluye despertando de forma brusca y atacando a su novia, M. J., Peter decide ir a ver a Reed Richards. En el camino, un encuentro con el Hobgoblin lo deja propenso a una violencia más intensa. El líder de los Cuatro Fantásticos lo recibe y comienzan los estudios.
Luego de horas de estudio, Reed le cuenta a Peter la verdadera naturaleza de su traje. El consejo es que lo abandone y lo deje en el Edificio Baxter para su examinación. Sin embargo, en esta ocasión, de forma violenta, Spider-Man decide conservarlo. De esta forma, el trepamuros sucumbe a la influencia del traje, lo que traerá una consecuencia devastadora.
El Hobgoblin lo persigue hasta casa de su tía May y, en busca de venganza, ataca e inicia una pelea que concluye con la muerte de May. En tanto, Peter comienza a desbordarse y asesina a Hobgoblin. Aquí comienza un camino en el que requerirá de la ayuda de muchos aliados para solucionar esto.
Todos los caminos conducen a la responsabilidad
Si hay algo que no hay autor que pueda negociar con este personaje, es su sentido de la responsabilidad. Chip Zdarsky es muy consciente de ello y no importa la decisión que Spider-Man tome, siempre terminará por volver al camino correcto, más allá de las consecuencias que esto acarree. Cabe mencionar que el autor decide enfrentarlo con otro personaje con el mismo camino.
La decisión tomada en el Edificio Baxter, sede de los Cuatro Fantásticos, es aprovechada al máximo. Reed Richards, también conocido como Mr. Fantastic, recorre un camino similar, casi a perpetuidad. Esto es algo que Sue Storm-Richards le deja en claro a Peter en un momento de la trama. Además, Zdasky aprovecha para homenajear otros momentos de la carrera del arácnido.
Uno de ellos es la rivalidad con Jameson, quien incluso se alía con villanos, nada menos que los Seis Siniestros. Estos últimos aparecen en su totalidad, pero redistribuidos. El camino del editor del Daily Bugle es en sí un homenaje a otro arco de Spider-Man. Gracias a estos elementos, esta obra es un parque de diversiones para cualquier fan del amigable (no tanto en esta historia) vecino.
El arte que narra la historia
En esta ocasión, Pasqual Ferry es quien ilustra las viñetas, con un estilo interesante, entre el realismo y lo caricaturesco. Esto es algo necesario cada vez que se utilizan personajes como los Fantastic Four, o incluso los Seis Siniestros. Pero aquí las composiciones destilan la solemnidad de la historia escrita por Zdarsky.
Spider-Man: La Sombra de la Araña es una historia madura, un relato de error y redención en el que pocos sufren como Peter Parker. Pasqual Ferry acompaña este sentimiento en cada página, pese a lo peculiares que puedan ser los trajes de los villanos. Aquí también entra Phil Noto, el portadista elegido, que en la tapa hace homenaje a Spider-Man con un momento icónico.
La estructura narrativa de “Spider-Man: La Sombra de la Araña”
Chip Zdarsky y Pasqual Ferry decidieron repartir los actos de una manera eficiente entre los cinco números de la serie. El primero se centra en la decisión de Peter y el comienzo de su descenso a la oscuridad y al asesinato. El segundo marca los primeros enemigos: Jameson, los Seis Siniestros y su relación con el simbionte. En tanto, el tercero será una épica vuelta al momento de partida.
Con la solidez del relato, Zdarsky y Ferry aseguran una trama que incluso se da el lujo de quedar abierta a una continuación. En ella, exploran al personaje en profundidad sin contrariar su esencia.
En cuanto al reparto es, por completo, funcional a la trama, y da perspectivas para aumentar las capas expuestas de varios personajes. Esta historia es, en definitiva, una obra autoconclusiva fantástica.En Argentina, Spider-Man: La Sombra de la Araña fue editada de forma reciente por la editorial Panini Comics Latinoamérica.