El próximo 24 de noviembre se estrenará el policial argentino “Natalia Natalia”, un film dirigido por el director Juan Bautista Stagnaro. Nota al Pie dialogó con él, quien se refirió acerca de sus comienzos en el cine, su participación en el guion de la película “Camila” del año 1984, y cómo fue llevar a cabo este nuevo film.
Acerca del film “Natalia Natalia”
De acuerdo con la sinopsis, Silvia Monteferrante (Sofía Gala Castiglione) asiste a un homenaje post mortem a quien fuera su ex marido. Allí, le hacen entrega de los atributos personales, gorra y sable, ante su notoria incomodidad.
Sin embargo, al mismo tiempo, también recibe un arma. Todo le hace sospechar que hubo algo más que una muerte accidental. De pronto, esta mujer se ve sumergida en una trama policial más oscura de lo que parece, que despierta sentimientos de los que estuvo intentando escapar toda su vida.
El film cuenta con un gran reparto, desde el protagonismo de Sofía Gala Castiglione hasta las actuaciones de Diego Velázquez; Valentina Bassi; Tony Lestingi y Demián Salomón. El guionista y director Juan Bautista Stagnaro regresa a dirigir un nuevo film de la mano de un policial, y de cara a reencontrarse con un gran público que disfrutó de sus aclamados éxitos.
¿Cómo fueron sus comienzos en el ambiente cinematográfico?
Bueno, yo en principio soy director egresado de la primera promoción de la Escuela Nacional de Cine (ENERC). Salí con muchas dudas sobre cómo empezar a salir al ruedo para entrar en el ambiente de la realización cinematográfica. No desde el ejercicio de una ayudantía o hacer la carrera hasta llegar a la dirección como ayudante, asistente, meritorio, sino directamente salir como director era realmente muy complicado.
En algún momento trabajé en montaje junto a Miguel Pérez que es un excelente compaginador. Yo por otra parte, me había egresado también como Licenciado en Economía, así que mí sueño era trabajar con mi carrera y en los ratos libres hacer cine; eventualmente algún cortometraje, el cual era más posible de realizar.
Sin embargo, sucedió el encuentro con un egresado como yo, Beda Docampo Feijoo, con quien tenía muchos elementos en común, ya que él era hijo de inmigrantes, egresado de la Escuela de Cine y abogado. Esto nos dio el pie para empezar a escribir un libro durante tres años donde flaubertianamente corregíamos hasta una coma, es decir, era un guion cinematográfico basado en la experiencia de la vida de ambos llamado “La educación sentimental“.
Dicho guion fue presentado en un concurso del instituto de cine de aquel momento donde ganamos el primer premio, generando que tuviéramos fuerzas para presentarnos ante varios directores.
Resaltando su participación como guionista en la película “Camila“, ¿cómo fue su experiencia?
Entre tantos otros directores pudimos tomar contacto con Maria Luisa Bemberg, a quien habíamos contactado para las clases de cine que nosotros dábamos. Obviamente le entregamos el libro para que lo lea, a lo que su comentario fue “dialogan bien chicos, ¿no quieren escribir un libro conmigo?”. Dicho libro terminó siendo “Camila”, el cual después de un periplo entre esa conversación y la materialización como película pasó casi un año y medio.
La película fue nuestra segunda o tercera experiencia de escritura de guión junto a Beda Docampo Feijoo. Al momento de encontrarnos con Bemberg, ella ya había tenido dos experiencias anteriores para querer escribir el guión de “Camila” que no le habían satisfecho.
Ahí fue cuando nos metimos en la escritura de aquel film, el cual fue una experiencia de apertura maravillosa, siendo que Maria Luisa era una directora muy disciplinada y estricta.
Sin ir más lejos, ¿cómo fue llevar a cabo el film “Natalia Natalia”?
El guion de “Natalia Natalia” fue una gozosa travesía de la ficción, es decir, de elaborar una ficción. Comenzó con un sueño, el cual se parece a una de las escenas del final de la película. Conviví con esa imagen durante mucho tiempo y poco a poco se iba desarrollando.
Primero que nada, diseñando los personajes que la podrían llevar a cabo para culminar en ese final. A partir de eso, construir una trama para que ese final pudiera ser coherente y un tanto sorpresivo e inesperado. Pero, al mismo tiempo, que no se transforme en un volantazo, sino que fuese la consecuencia de la lógica de las acciones de estos personajes así diseñados.
En este caso, me encantó trabajar el policial con una transgresión muy grande al género, el cual es que la protagonista sea una mujer y que, además, haya una unidad en el punto de vista; es decir la cámara o el relato donde en todo momento se la sigue a la actriz.
¿Cómo describiría la elección de les actores?
La elección de los actores surge a partir de la decisión de que la protagonista sea mujer. Por el diseño del personaje se impuso, en algún sentido, la presencia de Sofia Gala, porque es ella una excelente actriz. Se ha visto reflejado en otros papeles con otras características envuelta en una mirada que viene de fábrica, repleta de una enorme franqueza y muy directa con una manera de expresar sustentada evidentemente por experiencias anteriores.
Estas características hicieron que ella sea perfecta para este personaje femenino, el cual se ve, muy a su pesar, envuelto en una trama policial. El personaje había armado su vida tratando de escapar de este ámbito, pero la muerte de su ex esposo la obliga, en algun sentido, a asociar como actividad onírica, generando que esto sea aún más del género policial del cine negro.
Los elementos que develan los enigmas no son a través de lo racional, si no de la búsqueda a través de lo irracional, como la intuición de ir buscando oscuridad. Es decir, ella busca saber qué pasó con su marido. No por lo racional, si no por los impulsos que su inconsciente le va dictando.