Con la temporada finalizada y tras el interinato de Fernando Berón, el club San Lorenzo abrochó la contratación del experimentado entrenador Rubén Darío Insua, quien tendrá su segundo ciclo en la institución. Tendrá la difícil tarea de darle una identidad al club en el segundo semestre del año para evitar caer en la pelea temida por todos: la del descenso. Con más de 20 años como entrenador, Insua vuelve al “Cuervo”, donde obtuvo la Copa Sudamericana en el 2002.
A pesar de los problemas institucionales y políticos que sacuden al mundo de San Lorenzo con las licencias de Matías Lammens, por su rol en el Gobierno, y de Marcelo Tinelli (y posterior renuncia), en lo deportivo no pararon. Con la postura de buscar gente del riñón blaugrana, el primer paso fue contratar a Matías Caruzzo como coordinador del Fútbol Profesional, encargado de buscar y reunirse con los posibles candidatos a ponerse el buzo.
De esta manera el exdefensor central se reunió con algunos apellidos para escuchar sus proyectos, como el caso del uruguayo Juan Ramón Carrasco. Sin embargo, no logró convencerse y, ante la negativa de la primera opción, Néstor Gorosito, se llegó a la contratación del “Gallego” Insua. A inicio de semana y con una amplia danza de nombres, Caruzzo sostuvo: “De acá al miércoles vamos a tomar la decisión del nuevo entrenador”
“Hay varios nombres en carrera, yo he hablado con siete técnicos. Con muchos hablé y con otros no. Creemos y consideramos que debemos hacer una búsqueda clara de la mejor opción para este momento de la institución”, explicó el coordinador ante el inminente inicio del torneo en tres semanas. Por lo que debido a la apremiante falta de tiempo que tienen los clubes para armarse de cara al torneo local, San Lorenzo ya tiene nuevo entrenador.
Una gloria como jugador
Su tan ansiado debut en Primera División se dio en 1978 con la camiseta de San Lorenzo, su casa en el fútbol, en donde estuvo hasta 1985. Fue una pieza fundamental en el ascenso logrado el 6 de noviembre de 1982 con el club de sus amores, tras un año de su descenso. Esa temporada fue récord en asistencia de hinchas que siempre acompañaron al plantel hasta el partido final en la cancha de Vélez, donde venció 1-0 a El Porvenir con gol del propio Insua.
Luego de estar siete temporadas en el club de Boedo, se fue a Europa para defender los colores de Las Palmas de España en la temporada 1985-1986. Luego, retornó a Argentina para jugar para Estudiantes de La Plata entre 1986 y 1988; y luego en Independiente por dos años, de 1988 a 1990. En el cuadro de Avellaneda compartió plantel con jugadores poderosos y consiquieron el campeonato local de la temporada 1988-1989. Tras su estadía en el “Rojo”, vuelve a emigrar.
En su segunda oportunidad de jugar en el exterior, decidió irse a Ecuador, a Barcelona de Guayaquil. Allí estuvo entre los años 1991 y 1994 y obtuvo el campeonato local en 1991. Después de tres temporadas, se fue a Deportivo Cali, de Colombia, donde jugó entre 1994 y 1995. Por último, retornó a Argentina para jugar en Quilmes, donde se retiró en 1996, tras un solo año en el “Cervecero” y casi 20 de carrera.
Una trayectoria envidiable como entrenador
Dos años después de su retiro, inició su carrera como entrenador al frente de Barcelona de Ecuador durante la temporada 1998. En ese año logró el título nacional y fue subcampeón de la Copa Libertadores tras perder ante Vasco da Gama de Brasil. En 1999 se hizo cargo de Ferro, aunque solo duró cinco partidos y el plantel que armó terminó por descender. Tras su paso por el “Verde”, volvió a dirigir en Ecuador.
Tuvo su segundo ciclo en el año 2000 en Barcelona, donde logró salvarlo del descenso y lo clasificó a la siguiente Libertadores. Para el 2002, y con un tiempo sin trabajar, tuvo su primer ciclo con el buzo de DT de San Lorenzo en reemplazo de Manuel Pellegrini. Con el “Ciclón” se consagró campeón de la primera edición de la Copa Sudamericana en 2002. En 2003, decidió pegar la vuelta a Barcelona y lo clasificó nuevamente a la copa más importante a nivel continental.
Dos años después, en 2005, asumió como entrenador de Alianza Lima de Perú por una sola temporada. En 2007 fue contratado por Jorge Wilstermann de Bolivia, pero a media temporada decidió pegar la vuelta a Argentina. Asumió en Talleres de Córdoba hasta el mes de febrero de 2008, donde fue destituido del cargo. Para el 2009 volvió a probar suerte en Ecuador, pero como técnico de Deportivo Quito.
Con el equipo de la capital ecuatoriana se consagró en el campeonato local y le permitió al club ser bicampeón de su país. Tras una renovación del contrato, en 2010 lo despidieron por los malos resultados. Luego tuvo pasos por Barcelona otra vez, hasta que en noviembre del 2011 asumió en Deportivo Cali de Colombia, pero fue despedido por mal desempeño al otro año.
Su última década
A mitad del año 2012 retornó a Deportivo Quito, club que atravesaba una profunda crisis institucional y económica, para lograr la salvación del descenso; aunque en 2013 dejó dicho cargo. En 2015, tuvo un paso fugaz por El Nacional de Ecuador, pero en enero de 2016 fue presentado de manera oficial como el nuevo DT de Bolívar de Bolivia. Aunque cuatro meses después dejó el cargo por malos resultados. Con un período de tres años sin dirigir, volvió al ruedo en 2019.
En aquel entonces, fue oficializado como técnico de la Liga de Portoviejo del ascenso ecuatoriano, con la idea de devolverlo a la máxima categoría tras diez años. Tras una excelente campaña, consiguió el ansiado ascenso para la temporada 2020. Hace casi un año, en el mes de abril, fue presentado como entrenador de Binacional de Perú, pero tras solo tres partidos disputados, lo despidieron por conseguir una sola unidad de 9 en juego.
Una salida que permitió su llegada
Insúa hace tiempo que está en carrera como técnico blaugrana, antes que asumiera Pedro Troglio. Siempre hubo un obstáculo para su regreso: Tinelli. Como simpatizante “Cuervo” de corazón por su pertenencia al club, dijo en más de una ocasión que volvería al “Ciclón” si no estuviera el conductor de televisión. “No trabajaría con él, porque no tengo una buena relación”, sostuvo en 2021.
“Siempre que el club lo necesite voy a estar porque es mi obligación, pero el actual presidente en goce de licencia no me contrataría”, explicó en diálogo con Radio La Red cuando el club de Boedo buscaba nuevo DT en 2021.
Además, en dicha entrevista enfatizó: “El tema fue de índole personal. No tengo un buen concepto de él como individuo. Yo tengo problemas con él y él conmigo. Creo que se comportó de manera equivocada”. Pero su renuncia permitió que el “Gallego” asuma su segundo ciclo.