El proyecto de la Boleta Única de Papel (BUP) comenzó su debate el pasado martes en la Cámara de Diputados del Congreso de la Nación, con la presencia de expositores externes. Estes se inclinaron, en su mayoría, a favor de la propuesta presentada por la oposición.
La BUP plantea una sola boleta con los nombres y fotos de todes les candidates de cada categoría y partidos. El tratamiento del proyecto se lleva a cabo ante las Comisiones de Asuntos Constitucionales, Justicia y Presupuesto y Hacienda.
A diferencia del sistema de boleta partidaria, en este caso, el votante deberá marcar el casillero de quien desea votar. Después, se deposita la boleta única en la urna, sin usar sobre. Por medio de este sistema, se busca evitar gastos económicos en papeles, además de contar con todes les representantes de los partidos.
Durante el debate del pasado martes en la Cámara baja del Congreso, expusieron diferentes representantes a favor y en contra del proyecto. De ser aprobada la Boleta Única se implementará en las elecciones de 2023.
Un sistema más democrático y transparente
En el mundo, la mayoría de los sistemas electorales cuentan con la boleta única ya sea electrónica o en papel. Dentro de los que no se adhieren hay 16 países y en Latinoamérica están Argentina y Uruguay.
La ventajas que propone la BUP es un sistema más económico y sustentable con el ambiente. A su vez garantiza la “transparencia” en las elecciones para que les cuidadanes se sientan representades.
En la misma línea, manifiesta un ahorro económico en la impresión de boletas de todos los partidos que en muchas ocasiones quedan descartadas en las escuelas. También se garantiza que aparezcan representadas todas las ofertas electorales; y brinda equidad a les candidates, ya que sin importar si pertenecen a partidos grandes o chicos, tienen el mismo espacio dentro de la boleta.
Por tanto, la BUP elimina malas prácticas dentro de la política, como por ejemplo el voto en cadena y el robo de boletas, entre otros. Al mismo tiempo, se ahorrarían recursos por parte del Estado para la financiación de los papeles.
En Argentina, las provincias de Santa Fe, Córdoba y Mendoza; así como la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, ya cuentan con este sistema electoral. En cuanto a elecciones nacionales, se deberá unificar a través de una ley, para no afectar a la autonomía de las provincias.
Voces en contra de la modificación del sistema electoral
Los argumentos en contra de la BUP se centran en que el cambio de metodología generaría más problemas en el país ya que cada provincia tiene su propia autonomía. Además, se considera que el sistema de boleta partidaria funciona bien hace muchos años y se debe a su versatilidad entre las provincias y la nación.
En ese sentido, plantean que es un “terreno desconocido” ya que no hay estudio previo donde se marque el problema que presentan las provincias, ciudades y distritos. Además, afirman que desde el retorno a la democracia no se han denunciado fraudes y se garantiza la alternancia partidaria.
Con relación a la paridad de género, las mujeres expositoras manifestaron que este sistema puede afectar la representación política de las mujeres en las listas y la democracia paritaria. Por tanto debe realizarse un análisis de contexto antes de asegurar su implementación.
En la primera reunión que se llevó a cabo en el segundo piso del Anexo C de la Cámara baja, hubo 20 expositores invitades. De elles, 12 se manifestaron a favor del cambio en el sistema de representación electoral y 8 argumentaron en contra. La segunda reunión informativa está prevista para el próximo martes 24.