La inflación en Argentina parece no tener techo. Según informó el INDEC (Instituto Nacional de Estadística y Censos) el último mes de marzo hubo un aumento significativo del 6,7%. Esta cifra mensual se sitúa como la más alta registrada en el país en los últimos 20 años. En consecuencia, se ha generado una importante escalada de precios en los alimentos de la canasta básica sin un freno en el corto plazo.
Asimismo, la suba del primer trimestre del año alcanzó el 16,1%. Estos números generan preocupación en el Estado, teniendo en cuenta que en el 2021 se alcanzó el 55,1% interanual. Además, teniendo en cuenta el último índice de precios, volvió a presentarse una alta aceleración respecto al mes de febrero, en donde el IPC (Índice de precios al consumidor) llegó a un 4,7%. A esto, se le sumó un incremento en el precio de los alimentos cercano al 7,5%.
A partir de estos datos crudos, Nota al Pie realizó una consulta al economista Fabian Medina quien dio su opinión al respecto de la inflación y la crisis económica del país. Además, aseveró sobre los datos manifestados por el instituto de estadísticas.
¿Un tope a los aumentos?
En los últimos tiempos el Estado nacional ha barajado diversos métodos para frenar el aumento inflacionario y, sobre todo, en el índice de precios. Sin embargo, Medina ha considerado que recién ahora, con los últimos datos establecidos, han empezado un tratamiento para ir en contra de esos números. Según explicó, a fines de marzo y al comenzar a retrotraer los precios, se empezó a ver reflejado en el IPC una reducción en las décimas en comparación al mes de febrero con un porcentaje que varió del 7,5 al 7,2%.
Medina manifestó que estos cambios terminarán de tomar forma en el transcurso del mes de abril y mediados del mes de mayo. Dichas implementaciones afectarán positivamente, estima, a una canasta compuesta por 69 productos que se distribuyen usualmente a locales de cercanía, almacenes y kioscos.
Dolarizar o no la economía
El economista y Diputado Nacional, Javier Milei, ha manifestado recientemente su intención de cerrar el BCRA (Banco Central de la República Argentina) al expresar que “cuando el Banco Central determina la cantidad de dinero lo único que hace es determinar el nivel de precios. Entonces si se expande hace daño y si se achica hace daño y así ¿para qué lo quiero?”.
En relación a estos dichos, Medina consideró que sería una “locura” dicha determinación, ya que “si eliminas al BCRA pasaría a dolarizarse el país, tal como hizo Ecuador en 1995 con la dupla (Abdalá) Bucaram – (Domingo) Cavallo y terminaríamos peor que en el 2001“.
Aclaró que la acción de dolarizar provoca un cambio en donde todos los pesos argentinos pasarían a ser dólares. Y para ello sería necesario cerca de U$S 120 mil millones de los cuales vendrían de Estados Unidos. En consecuencia, llenaría de inflación al mundo devaluando el dólar casi un 40%. Finalmente, tendríamos una inflación en dólares y no se terminaría el problema endémico que hace casi 60 años padece nuestro país.
Un plan equitativo
Medina cree que si se llevase a cabo un plan antiinflacionario que abarque distintas variables tales como servicios públicos y combustibles, “en un año y por única vez podrías bajar alrededor de 15 puntos de inflación situándonos en los 35 o 37% que tuvimos en 2020”.
Por otra parte, el economista coincidió con su colega Juan Alberto Enrique en que, dentro de las políticas cambiarias, el dólar presenta valores muy altos inclusive hoy. Considera que el dólar tendría que estar cercano a los 180 pesos, teniendo en cuenta estos parámetros impositivos estimativos. Al mismo tiempo, aquelles que obtuvieron dólares en enero a 225$ hoy ya perdieron un 30% del valor de compra. Es decir, los que compraron con 100 mil U$S blue en enero poseen en la actualidad apenas 84.500 U$S.
Medina considera que estamos en este nivel de inflación desde enero del 2018, a partir de la negación a la Argentina en el acceso al mercado de bonos, debido al sobreendeudamiento del país producido entre los años 2016 y 2017. Inclusive, entre el 2021 y marzo del 2022 no se pudo corregir el despilfarro en deuda que generó el gobierno de Mauricio Macri. Sin embargo, Medina consideró finalmente que con los acuerdos del FMI (Fondo Monetario Internacional) y el Club de París se puede empezar con un plan total y normalizador.