Desde el Observatorio de Políticas de Seguridad (OPS), de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación de la Universidad Nacional de La Plata realizaron un informe sobre homicidios dolosos ocurridos en 2020 en el Gran La Plata registrados en la prensa digital. En él “se reconstruyen algunas características centrales de la violencia letal en la región, al tiempo que se examina el tratamiento mediático de estas muertes”, según informaron desde el organismo.
La Coordinadora del OPS, Paz Cabral, en diálogo con Nota al Pie destacó, entre los resultados del informe, los referentes al contexto en que se produjeron: en su mayoría en “conflictos interpersonales”. También, la mayor parte de estos hechos fueron cometidos presuntamente por varones. A su vez el informe analiza la perspectiva de los medios de comunicación.
Los datos que determinó el estudio
El relevamiento realizado para el año 2020 en la prensa arrojó un resultado de “63 hechos de homicidios en la región del Gran La Plata. En ellos fueron asesinadas 65 personas. La mayoría de los homicidios de la región, en el 2020, se produjeron en el marco de conflictos interpersonales (41,2%)”, según detalla el informe.
En segundo lugar “aparecen los vinculados a contexto de robo (19,1%), luego los homicidios producidos en el marco de intervenciones de policías y/o fuerzas de seguridad (8,8%), los femicidios y travesticidios/transfemicidios (7,4%) y los hechos de violencia en el grupo familiar (7,4%). En 16,2% de los casos, la información disponible no permite determinar el contexto”.
Al respecto Paz Cabral destacó como un aspecto importante; que “el trabajo permite poner en cuestión ciertas ideas ampliamente difundidas, por ejemplo la imagen de que la mayoría de los homicidios se dan en contextos de robo y entre personas desconocidas, lo cual se asocia con el imaginario de la inseguridad”.
“Por el contrario, el informe muestra diversos contextos en los que ocurren los homicidios y destaca que la mayoría se produce en el marco de conflictos interpersonales entre personas conocidas”, detalló.
La necesidad de interpretar los hechos con perspectiva de género
“Una constatación central es que casi todos los homicidios de este tipo tienen como protagonistas a varones: la mayoría de las víctimas (25 de 28) y de las personas investigadas como autoras (35 de 38), son varones”, según menciona el estudio.
“Por su parte, la mayor parte de las víctimas tenía entre 18 y 34 años al momento del homicidio (18 de 28). De manera similar, la mayor parte de les presuntes autores tenía entre 18 y 34 años (19 de 38) o entre 35 y 44 años (8 de 38). En este sentido es posible decir que les principales protagonistas de los homicidios en el marco de conflictos interpersonales son varones jóvenes y en la adultez temprana”,continúa el texto.
Al respecto, Cabral sostuvo que esto “plantea la necesidad de interpretar estos hechos desde una perspectiva de género, es decir, teniendo en cuenta las desigualdades y la socialización diferencial de acuerdo al género; lo cual promueve relaciones distintas con la violencia”.
“En muchos casos la violencia se utiliza para gestionar y resolver conflictividades previas. Y también es importante interpretar los usos de la violencia pensando en su rol productivo; para la construcción de ciertas identidades, para la obtención de respeto y la producción de masculinidades, entre otros aspectos”, agregó.
Perspectivas de los medios de comunicación
Otros datos del informe mencionan que “el 58,7% de estos hechos se produjo en espacios públicos, el 30,2% en las viviendas de las víctimas, el 7,9% en otras viviendas y el 3,2% en otros lugares. Además, el 57,1% de los homicidios fueron consumados con armas de fuego. El 23,8% con armas blancas, 11,1% con otro tipo de armas (incluye objetos contundentes, elementos punzantes y fuego, entre otros) y 7,9% por medio de la fuerza física. El 47,7% de las víctimas tenía entre 18 y 34 años al momento del hecho”.
Además, al menos en el 50,8% de los homicidios existía una relación previa entre víctimas y presuntes autores. En el 19% no había relación previa y en un 30,2% ese dato no se pudo determinar. Por su parte, la principal relación entre estos actores es de vecindad: en el 37,5% de hechos registrados en los que hay relación previa; las víctimas eran vecinas de quienes cometieron los homicidios”.
Y otro punto más general a destacar es que, a partir del análisis “el informe cuestiona ciertas perspectivas presentes en los medios de comunicación. Por ejemplo, aquellas que buscan presentar ciertos homicidios como violencias sin sentido o inexplicables”, argumentó la coordinadora. Y agregó que “frente a este tipo de miradas; el trabajo propone interpretar los homicidios en función de las dinámicas sociales más amplias, especialmente teniendo en cuenta las violencias y desigualdades estructurales que atraviesan la vida de les actores”.
Avanzar en políticas de gestión de las conflictividades
Desde el OPS resaltaron “la importancia de avanzar en políticas de gestión de las conflictividades, especialmente, se subraya la necesidad de dispositivos locales que abonen a la resolución de conflictos entre personas que se conocen y viven en zonas cercanas” .
“Las problemáticas en torno a los delitos, conflictos y violencias, no tienen una única causa y, por ende, las respuestas brindadas a los mismos tampoco pueden ser unívocas”, sostuvieron. E indicaron que “estas cuestiones deben abordarse a partir de estrategias integrales que articulen las políticas de seguridad con otras políticas públicas”.