Familiares de las víctimas y sobrevivientes de dos tragedias solicitan que se transformen dos espacios en centros de memoria. Se trata de aquellos en donde ocurrieron la masacre de Cromañón y el incendio del taller textil Luis Viale.
En ese sentido, presentaron distintos proyectos que proponen la expropiación de estos inmuebles. Para tratarlos, se convocó el jueves próximo, a las 17, una reunión de la Comisión Especial de Seguimiento y Prevención de la Violencia Institucional del Parlamento porteño.
Los inmuebles en disputa son: por un lado, uno ubicado en Bartolomé Mitre 3060, en donde funcionó el local bailable “República Cromañón”, Por el otro, el ubicado en Luis Viale 1269, en el cual vivían y trabajaban 65 personas en condiciones de explotación laboral y hacinamiento.
Cromañón sigue viva en la memoria
Impulsado por el Movimiento Cromañón, una primera propuesta busca visibilizar y conmemorar la tragedia de Cromañón. Durante un concierto de Callejeros, el 30 de diciembre de 2004, y superado el límite de concurrentes habilitades, se generó un incendio a raíz de una bengala que se cobró la vida de 194 jóvenes.
«La masacre de Cromañón es un caso en el cual el Estado tiene la responsabilidad de reparar, pero el (Poder) Ejecutivo cae en una situación de violencia institucional al no acompañarnos en nuestro derecho a salir adelante y el (Poder) Legislativo nos desoye hace bastante tiempo porque no da una respuesta al proyecto», dijo a Télam Belkyss Contino, sobreviviente del siniestro.
Memoria y Justicia por los obreros textiles de Luis Viale
Un segundo plan contó con el impulso de la Comisión por la Memoria y Justicia de los obreros textiles de Luis Viale. El siniestro tuvo lugar el 30 de marzo de 2006. Ese día, se desató un incendio en la planta superior por un desperfecto eléctrico y mató a seis personas. En el taller textil vivían alrededor de 65 personas, recién llegadas de Bolivia para trabajar en condiciones de explotación laboral y sin medidas de seguridad.
«Buscamos que el lugar sea un espacio para las próximas generaciones, para nuestros hijos, que tengan donde organizarse y capacitarse porque las víctimas de Luis Viale eran todos inmigrantes bolivianos que no sabían nada sobre los derechos ni a quién recurrir», aseguró Lourdes Hidalgo en diálogo con Télam.Por su parte, la legisladora del Frente de Todos y Presidenta de la Comisión de Derechos Humanos, Victoria Montenegro, respaldó las propuestas.
Afirmó que «no pueden funcionar en esos lugares nada más que sitios de conciencia, a nadie se le puede ocurrir otra cosa». Y agregó que: «Hay que mantener en la memoria las tragedias que sucedieron en los dos edificios para contribuir al ejercicio ciudadano que sirva para sembrar conciencia y derechos», destacó.