La autovía sur, puntualmente el acceso sur a la ciudad de Resistencia, capital de la provincia del Chaco, se ha convertido en una odisea. Es el principal epicentro de los accidentes en la ciudad, debido a la mala señalización y mínima iluminación de los carriles. Comenzó su construcción en el año 2012 con el mandato del Gobernador, Jorge Milton Capitanich.
Hoy, después de 9 años de haberse iniciado, los avances son apenas superiores al 50% de la obra, pasando a hacerse cargo en consecuencia Vialidad Nacional. El gran problema de esta situación no es la gran espera de la obra en construcción, sino el hecho de no encontrarse señalizado e iluminado de manera correspondiente.
Esto transforma al sitio en un fuerte foco de accidentes debido a las dos causas anteriormente manifestadas y sumándose además, el pésimo estado de la calzada, que con el pasar de los camiones de gran porte, destruye el poco ripio que queda. Las promesas de nuevas calzadas, colectoras, puentes, conductos pluviales, iluminación y semaforización, quedaron en el tiempo.
Desde sus inicios la obra se estableció hacia una posición de letargo total. Posterior a esos tres primeros años de avances casi nulos, empezó a formar parte del Plan Belgrano en que Vialidad Nacional toma la “posta” para continuar su desarrollo. Con el mandato de Mauricio Macri, la construcción retomó su estancamiento y en ninguno de los 4 años de su cargo hubo mejoras en la obra.
El presente, con algo de expectativas
Recién en el 2020 se reiniciaron trabajos para concluir con el proyecto planteado. Aunque hoy el mayor problema está en el tramo entre el cementerio privado Parque Jazmín y el autódromo de la capital El pésimo estado de la ruta, un intento provisorio de colectora y la gran circulación de automóviles y motocicletas, conforman uno de los laberintos de la ciudad.
La señalización es precaria, transformándose en imposible circular a más de 40 km al anochecer. Sumado a esto, ese tramo resulta ser uno de los únicos puntos de conexión entre algunos barrios de la periferia y el centro. La Ruta Nacional N°11 posee un recorrido clave en los cuales es utilizada para unir distintas provincias, entre ellas Santa Fe, Formosa y Chaco.
Esta arteria, conduce gran parte de las cargas pesadas entre estas y las demás provincias, reflejándose no solamente como un peligro para los camioneros sino también para les ciudadanes que deben pasar en sus autos y motos por las huellas que dejan esos vehículos.
Hoy el trabajo se va completando de un modo lento, casi a paso de tortuga, pero avanza. Los periodos de cuarentena impulsaron la concreción de los resultados, y rompieron con la quietud implantada desde 2016, que tuvo como fecha límite el 2019. Ahora solo faltan que se señale e ilumine de manera apropiada para evitar más accidentes.